Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Tribuna

Benicàssim y los efectos del «catastrazo»

Cada año, cuando los vecinos de Benicàssim tenemos que pagar el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles, nos sentimos esquilmados por el pago desproporcionado al que tenemos que hacer frente. Y es que el «catastrazo» que impulsó el gobierno del Partido Popular y ARB en 2006 ha aumentado de manera considerable la carga fiscal que debemos soportar los benicenses debido a una revalorización de nuestros bienes inmuebles que no se ajusta a la realidad.

Pero ¿cómo hemos llegado a esta situación? ¿Por qué los vecinos de Benicàssim tenemos que pagar más impuestos que los habitantes de otros municipios similares al nuestro? Lo primero que debemos saber es que el valor del IBI se fija en función de dos parámetros: el valor catastral, que asigna la Dirección General del Catastro (perteneciente a la Agencia Tributaria) y el tipo impositivo, que fija el ayuntamiento en su ordenanza fiscal, con un límite inferior de 0,40 y superior del 1,10. En Benicàssim, en el curso 2002-2003, el Partido Popular insistió a la Agencia Tributaria en una revisión del principal parámetro que fija el IBI: los valores catastrales, porque veían en su actualización una forma de aumentar los ingresos y combatir el endeudamiento creciente del ayuntamiento.

En el año 2005, siendo alcalde Manuel Llorca (ARB) y Susana Marqués (PP) concejala de Hacienda, la dirección general del Catastro le recordó al consistorio aquella petición y le pidió que confirmara si quería la revisión que habían solicitado, pues llevarla a cabo iba a tener un coste de 300.000 euros para las arcas municipales. La respuesta de Llorca y Marqués fue tajante: pidieron que se activara la revisión con urgencia para que sus efectos entraran en vigor lo antes posible. Un año después, la Agencia Tributaria aprobó los nuevos valores catastrales para su aplicación en los recibos de 2007, lo que supuso un incremento que va desde el 200 hasta el 1.000 % en algunos casos.

En los últimos años, las peticiones de otros ayuntamientos, que no el de Benicàssim, han conseguido que el Ministerio de Hacienda aplicara una reducción para los valores catastrales fuera de mercado. Así mismo, el ayuntamiento, ha bajado el tipo impositivo que fija en su ordenanza fiscal para intentar frenar a esta escandalosa subida del IBI.

La normativa especifica que no se puede solicitar una revisión hasta que no pasen cuatro años de la última realizada, pero este plazo ya ha transcurrido. Por ello, cuando lleguemos a la alcaldía, los socialistas de Benicàssim solicitaremos la revisión a la baja de los valores catastrales de los bienes, ajustándolos a la situación económica actual. La realidad del mercado tiene su reflejo en las peritaciones de las entidades bancarias, que han reducido hasta el 50% las valoraciones de los inmuebles.

El valor catastral no sólo influye en el recibo del IBI sino que afecta a todos los vecinos en su declaración anual de patrimonio, a la hora de pagar impuestos por donaciones o transmisiones, en la liquidación de las plusvalías ? Los socialistas defendemos que ha llegado el momento de acabar con esta situación de injusticia; los vecinos de Benicàssim tenemos que dejar de pagar por la pesada carga del «catastrazo» del PP.

Compartir el artículo

stats