Los principales beneficiarios de la decisión del equipo de gobierno de Nules de hacer que las discomóviles de las fiestas patronales recorran diferentes zonas del municipio, a parte de los vecinos de las viviendas limítrofes con el Recinto de Fiestas, serán los seis bares que las acompañarán cada noche y que, en contrapartida, asumirán los costes tanto de la instalación diaria de las barras, como de los wc públicos, según confirmó el alcalde, David García.
La noticia ya la avanzó en exclusiva Levante de Castelló a las pocas semanas de iniciarse la legislatura, por lo que se puede considerar que ésta fue una de las primeras propuestas del actual equipo de gobierno, que planteó la medida como consecuencia de las conversaciones mantenidas con los vecinos del grupo Inés Alcázar, situado a pocos metros del Recinto de Fiestas, donde hasta ahora se centralizaba la actividad nocturna de las celebraciones patronales.
Ya entonces David García afirmó que se debía repartir «entre todos los vecinos tanto las cosas buenas de las fiestas, como las malas», refiriéndose a las molestias por ruido que provocan las discomóviles, dado que suelen estar en marcha hasta las 6 o las 7 de la mañana. De este modo, de las nueve programadas, solo dos se realizarán en el recinto de fiestas, el resto recorrerán prácticamente todo el municipio, ya que la del 21 de agosto tendrá lugar en la avenida Castellón, en la zona del Jardín Botánico; la del 22, en la calle Rafael Catalá Lucas, en el área del Jardín Cromático; la del 23, en la calle Santa Natalia; la del 24, en la plaza Mayor; la del 25, en la calle San Vicente, frente al Polideportivo Municipal; la del 26 en la avenida Mijares y la del 28 en la avenida Jaume I, delante del Estadio Noulas; reservándose las de los días 27 y 29 para el recinto de fiestas.
Se podría decir que los principales perjudicados serán los empresarios que, como hasta ahora, instalarán las cuatro casetas del Mesón de la Tapa, en el Recinto de Fiestas, ya que si hasta ahora mantenían su actividad hasta que cerraban las discomóviles, ahora deberán conformarse con hacerlo con el cierre de las orquestas, que suelen alargarse hasta las tres o las cuatro de la mañana. Sobre este tema, David García afirmó que el ayuntamiento debe preocuparse por el interés general, y son más las personas que se benefician de la medida que las que son perjudicadas.
En cuanto a la infraestructura que acompañará a la instalación diaria de las discomóviles, Adrián Sorribes, concejal responsable de la brigada, aseguró que no será ningún problema que sean los trabajadores municipales los que se encarguen de colocar, retirar y trasladar los escenarios de un lugar a otro. Sorribes señaló que, durante la quincena de fiestas «todos los operarios de la brigada municipal están en activo, por lo que se podrá asumir este trabajo sin problemas», por lo que no habrá costes adicionales.
Desde el equipo de gobierno no se ve ningún inconveniente en esta decisión, más bien al contrario, aunque reconocen que se trata de un proyecto piloto, «tendremos que ver cómo sale todo para que si hay algún error, se pueda rectificar y mejorar de cara a las próximas fiestas», aseguró.
Por el momento, a dos semanas del inicio de las fiestas, el ayuntamiento ha empezado a repartir entre las peñas un hoja informativa para que todas sepan cuándo y dónde se celebrará cada discomóvil. Por otra parte, David García señaló que los responsables municipales se reunieron con todos los pubes y bares de la localidad para ofrecerles la posibilidad de asumir las barras en estos eventos, de manera que finalmente seis tomarán parte de la fiesta, «por lo que se repartirá más el beneficio que se pueda obtener». Así, desde el punto de vista municipal todos son pros, aunque faltará por ver cuál será la respuesta vecinal.
