Tras conquistar la Supercopa de Europa en Tiflis en un emocionante partido ante el Sevilla, el Barcelona prosigue el camino hacia el ansiado sextuplete en el nuevo San Mamés (22.00 horas), donde el Athletic puede aprovecharse de su cansancio para sacar ventaja en la ida de la Supercopa de España.

El Athletic Club lo afronta con un ojo en la próxima eliminatoria europea que tendrá afrontar a continuación ante el MSK Zilina eslovaco, una ronda en la que se juega estar en la Fase de Grupos de la Liga Europa, uno de sus objetivos prioritarios para esta temporada.

No obstante, el equipo de Ernesto Valverde no le hace ascos a una competición que podría darle el primer título oficial en los últimos 31 años, desde que, precisamente, se llevase la Supercopa 1984-1985 sin tener que jugarla en su calidad de campeón de Liga y Copa.

Esa circunstancia fue la que hizo cambiar las normas de una competición encajada en el calendario como un torneo de verano pero que ha adquirido prestigio e importancia por ofertar un título oficial que sumar al palmarés.

Es esa condición de competición oficial lo que ha ido aumentando la importancia de una Supercopa de España que este año vuelve a suponerle al Barcelona una estación más en su, por el momento imparable, camino hacia un nuevo sextete.