Los alumnos del taller de empleo de Segorbe han llevado a cabo las obras de rehabilitación de la capilla de la Virgen de Gracia y el Ángel Custodio, también conocida como la capilla de San Pedro, cuyo origen data del siglo XV.

Tal y como explicó el concejal de Cultura y Patrimonio, Pedro Gómez, «este espacio municipal, que hasta ahora estaba en desuso, se utilizará para fines principalmente culturales, ya que tiene muy buena estética y una acústica fantástica» argumentó Gómez quien apuntó que «será perfecta para la realización de exposiciones y pequeños conciertos».

Las obras, que han supuesto una inversión de 3.135 euros en material fungible, han consistido en la reparación de revestimientos, de la moldura y de elementos ornamentales, tanto exteriores como interiores, prestando atención especial al escudo de Segorbe y las hojarascas que lo adornan.

También se ha pintado el exterior y el interior de la capilla.

El proyecto culminará en las próximas semanas con la instalación de la iluminación, dispuesta para poder tematizar la sala según las características del evento que se vaya a desarrollar. La capilla dispone de un espacio diáfano amplio, por lo que permite una gran versatilidad en su uso.

Durante la Guerra Civil, la capilla fue expoliada y la imagen de la Virgen de Gracia robada y, desde entonces, esta capilla ha estado en desuso.

Cabe destacar que la construcción de este templo fue mandada construir hacia 1499 en la Iglesia de San Pedro por Enrique de Aragón y Pimentel, el Infante de Fortuna, en tiempos del segundo mandato del obispo Bartolomé Martí.

Ya a mediados del siglo XVII, desentendiéndose los duques de su patronato, este pasó a ser propiedad de la ciudad. A partir de este momento, hacia el tercer cuarto de siglo, dicho espacio cuadrangular se estructura arquitectónicamente a la manera barroca, se cubre con cúpula y se decora con tallas en los capiteles.