El nuevo Consell no empezó con buen pie en materia de igualdad. Se pasó de la pretendida conselleria a una dirección general...

La igualdad está en una conselleria que es la vicepresidencia. No es una conselleria cualquiera y eso le da un valor añadido. Es una dirección general todavía precisamente porque no volveremos a ser un instituto hasta que una ley lo apruebe. Una ley de las Corts nos volverá a constituir en un Institut.

Pero tampoco las izquierdas inauguraron la nueva era con sentido de igualdad. Una Mesa de las Corts compuesta por hombres, solo dos mujeres como síndic (de derecha, por cierto) y cinco hombres de portavoces en Valencia. ¿Cómo convencer a la sociedad con este mensaje político?

El mensaje político que hemos dado es que tenemos un Consell paritario por primera vez en la historia. No solo el Consell sino también en los rangos inferiores. Es verdad que hubo un fallo en las Corts, pero lo corregimos. Hoy hay una vicepresidenta en la Mesa. Pero esto viene a reflejar que sigue siendo fundamental que haya cuotas de representación de mujeres porque cuando no se hace fallamos.

¿Decepcionada con sus compañeros?

Decepción no, porque los pasos han sido gigantes en muy poco tiempo. El hecho de que por primera vez haya un gobierno paritario es muy significativo. Es muy importante y queríamos visualizarlo bien. Fallamos en ese momento de la Mesa de las Corts, sí, y como lo reconocimos, y a exigencia de muchas mujeres, ahí tenemos a la vicepresidenta de la Mesa que es mujer.