El Castellón de los extremos, de las bandas y los centros al área volvió a caer en Alzira. La receta favorita del entrenador Ramón María Calderé, la que forzó el cambio de estilo mediada la pasada temporada y la principalmente empleada en la presente, se estrella una y otra vez con los números. Ayer, un miembro del cuerpo técnico del Alzira, Mario Clari, encargado del control estadístico, compartió algunos datos del partido del domingo. Entre ellos, uno destacaba: el Castellón metió 35 balones al área y apenas consiguió rematar cuatro.
Los datos vienen a corroborar las sensaciones. En el anterior encuentro, en el empate sin goles con el Atlético Saguntino, el Castellón insistió una y otra vez en el plan. Balón a la banda y centro al área. La réplica fue también idéntica. Mucho centro, poco remate y menos gol. Si contra el Saguntino pesó la ausencia de un ariete, en Alzira debutó el nuevo fichaje: Antonio, un delantero de 1.94 metros que validó en la teoría el plan del cuerpo técnico.
De los once goles marcados esta temporada, tres han llegado tras centros al área. Uno fue por bajo: el de Rubén Suárez al Jove Español tras recibir de Tornero. Los otros dos nacieron en Pruden, con algo de rebote: el empate de Saizar en el campo del Acero y el gol de Fonte al Ontinyent en Castalia. Del resto, cinco surgieron en saques de esquina o faltas laterales, uno en una transición y dos (incluyendo el de Lolo en Copa del Rey) en acciones trenzadas.
Peores números
Tras siete partidos de Liga, el Castellón de Calderé presenta peores números que el Castellón de Joan Esteva. La temporada pasada, el Castellón sumaba 12 puntos, cuatro más que en la actualidad. Esteva fue destituido en la décima jornada, tras acumular cuatro partidos sin ganar, justo cuando comenzó a introducir a los nuevos fichajes en la rotación del equipo albinegro. Esteva había empezado la Liga con seis partidos sin derrota. Cuando fue destituido, estaba a siete puntos del líder, el Atlético Levante.
El Castellón lleva ahora cinco jornadas sin ganar y el Ontinyent, el líder, se escapa a diez puntos. La autoridad de Calderé se vio reforzada la pasada semana, tras la baja del central Javi Selvas. El mediapunta Rubén Suárez acumula dos jornadas como suplente. En el brete, al problema de juego y efectividad se suman la urgencia natural del club y el cambio de guardia en el vestuario. Tiempo hay, pero el margen es escaso.
