El Rey Jaume I volvió ayer a Nules con Gilabert de Centelles y otros personajes históricos en la recreación que centró la programación festiva de ayer en la localidad. Cerca de 50 recreacionistas se sumaron a la primera representación de este tipo que se realiza en el municipio y que, según explicó su director, el actor Jordi Ballester, recupera el momento histórico en el que se rindió el castillo de Nules, en manos de los sarracenos, de forma pacífica.

Varios cientos de personas se reunieron en el Jardín Botánico para poder participar activamente en un acto que se convirtió en la principal novedad del programa de las fiestas patronales de la Soledad.

La mañana comenzó con la concentración de los integrantes del ejército cristiano, el que acompañaría a Jaume I en su entrada a Nules, en el entorno del Convento, desde donde partieron, acompañados por una comparsa de tambores, por las principales calles de la Vila hasta llegar al Jardín Botánico, donde se encontraba el campamento sarraceno.

La indumentaria utilizada por los recreacionistas, «fielmente reproducida», según explicó Ballester, ayudó al público a trasladarse en el tiempo al momento histórico en el que nació el municipio. De hecho, el pasaje seleccionado fue adaptado para la ocasión por el cronista oficial de la Vila, Vicent Felip Sempere, y recordaba cómo, después de conquistar Borriana, el rey Jaume I, de camino hacia El Puig, previamente al asedio de la ciudad de Valencia, consiguió la rendición pacífica de los castillos d'Uixó, Nules y Almenara.

Entre los personajes representados más relevantes cabría destacar la del noble Gilabert de Centelles, encarnado por el alcalde de Mascarell, Felipe Sánchez; el obispo de Tortosa o el Alamí que rindió el castillo. Además, se contó con la colaboración de grupos recreacionistas venidos de l'Alcora, Valencia, Castelló, Rubielos de Mora, Zaragoza y Teruel.

En un emotivo final, el director de la recreación, Jordi Ballester, emplazó a los vecinos de Nules a mantener esta iniciativa, implicándose incluso en la organización como miembros de los diferentes bandos, igual que sucede en otras ciudades como l'Alcora.

Dado que la jornada de ayer coincidió con la celebración del 9 de octubre, la programación incluyó además del acto institucional, el cual contó con otra novedad, la actuación de la Nova Muixaranga d'Algemesí, que con sus tradicionales castellers congregaron a cientos de personas.

La de ayer fue una de las jornadas con más peso cultural de la semana festiva, después de los Jocs Florals, y se convertía en el contrapunto de la noche anterior, con una cita mucho más lúdica y popular, la Nit de la Torrà, en la que se contó con la asistencia de unas 3.000 personas que, como en años anteriores, quisieron aprovechar este acto de hermandad donde tienen cabida peñas y grupos de vecinos de todas las edades.