Políticas sociales y apoyo a la cultura son los dos pilares sobre los que se asientan los presupuestos municipales de Betxí para 2016 aprobados ya por pleno.

El equipo de gobierno de Compromís, presidido por Alfred Remolar, «apuesta por la ayuda a los más desfavorecidos» y «reafirma su apoyo decidido a la cultura y el deporte» en la localidad. Lo demuestran, por una parte, el incremento del 18% en la partida de asistencia social y, por otra, el aumento del dinero para la biblioteca, el auditorio y el archivo municipal (subida del 21%), actuaciones culturales (19%) y fondos destinados al Casal Jove (29%). Igualmente, las actividades deportivas disfrutarán de un 16% más de inversión que el presente año.

Conjuntamente con el incremento del capítulo de gastos, que es el del 3,5% hasta situarse cerca de los cinco millones de euros (concretamente, 4.764.138), el alcalde de Betxí destacó ayer la continua reducción de la deuda municipal como uno de los grandes logros de su equipo de gobierno en política económica. «Este año pagaremos un 24% menos en deuda pública», señaló ayer Remolar, quien recordó que en 2015 se ha pagado 450.000 euros y el próximo año la cantidad bajará hasta los 362.000. Betxí acabará 2016 con una deuda pendiente de 2.100.000 euros. «Como referencia, en 2011 había 4.200.000 euros de deuda. Eso supone que en cinco años la habremos reducido a la mitad», apunta el alcalde. «En los últimos cinco años no hemos solicitado ni un solo préstamo a los bancos», se felicitó Remolar.

En cuanto a las inversiones para el 2016, una gran parte del presupuesto irá destinado a la reparación y mejora de viales, como la remodelación de la avenida Joaquín Dualde y el asfaltado de caminos. La renovación de la iluminación en la escuela infantil, el auditorio, el mercado y el polideportivo, espacios que dispondrán a partir de ahora de bombillas LED, contará con 20.000 euros. El ayuntamiento vuelve a incluir el Palau en el capítulo de inversiones, con 125.000 euros, además de recuperar para el próximo año el 50% de la paga extra a los funcionarios eliminada por el gobierno central en 2012.