El Camp Nou enfrentará esta tarde a Barcelona y Atlético de Madrid en un duelo directo por el liderato de la clasificación, ahora en poder del conjunto azulgrana, con los dos con 48 puntos, y quizá por media Liga, en un choque imponente y con menos margen de error para el equipo rojiblanco.

Es una gran oportunidad para el Barça de asestar un golpe a la Liga. Una victoria de los catalanes sumada a otro triunfo, el 17 de febrero, ante el Sporting Gijón, en el partido aplazado de la primera vuelta, le consolidaría al frente de la tabla y podría dejar a Atlético y Real Madrid a seis y siete puntos, respectivamente.

El Barcelona viene de emplearse a fondo para eliminar al Athletic Club en la Copa del Rey, pero Luis Enrique no se dejará nada en el tintero para recibir al conjunto rojiblanco. Recuperados Jordi Alba (elongación del bíceps femoral), Arda Turan y Andrés Iniesta (anginas), el técnico tiene donde elegir.

El Barcelona llega a la cita reforzado por sus estadísticas recientes contra el Atlético de Madrid. Desde que lo dirige Luis Enrique siempre le ha ganado. La pasada temporada, en cuatro partidos: 1-0 y 2-3, en la Copa del Rey, y 3-1 y 0-1 en la Liga, en la que celebró el título en el Calderón. Y en esta, por 1-2 en la primera vuelta.

Enfrente, la visita al Camp Nou es clave para el Atlético. «Un buen resultado nos daría muchas aspiraciones de luchar por la Liga. Y vamos a por ello», decía el pasado miércoles Gabi Fernández, el capitán rojiblanco. Simeone, con las bajas del portugués Tiago Mendes, por lesión, y del argentino Correa, por sanción, saldrá con casi todo su once tipo en Barcelona.

Cautelar para fichar

Por otro lado, la Comisión de Apelación de la FIFA concedió ayer al Atlético de Madrid la «suspensión cautelar» de su sanción de no poder fichar ni dar de alta jugadores durante la temporada 2016-17, «mientras se resuelve el recurso presentado» por la entidad rojiblanca, según informó el club.