El gerente del Hospital Provincial de Castelló, Joaquín Sanchís, ha despejado las dudas sobre la adquisición del acelerador lineal tras varios días de rifirrafe político entre la Diputación Provincial y la Conselleria de Sanidad en torno a la financiación del equipo de radioterapia. En declaraciones a este diario, el responsable del centro aseguró ayer que el hospital «va a contar con un nuevo acelerador sí o sí».
«Soy consciente de que es una necesidad asistencial, por lo que vamos a cumplir con el compromiso adquirido por la Conselleria de Sanidad con los ciudadanos de Castelló, que no es otro que trabajar para que la atención que requieren nuestros pacientes prevalezca por encima de todo», señaló. De esta manera, el gerente del hospital quiso dejar claro que el acelerador se comprará pese a los obstáculos presupuestarios con los que se ha topado el centro. En este sentido, advierte de que «si Diputación hubiera realizado una aportación extraordinaria con carácter finalista nos hubiéramos evitado todos estos problemas».
Sanchís hizo referencia así a la fórmula contable utilizada por la institución provincial para la financiación del equipo de radioterapia: la diputación no ha aportado una partida específica de su propio presupuesto a la compra del equipo de radioterapia, sino que se ha limitado a transferir los fondos del Ministerio de Administraciones Públicas, sobre los que no interviene, y que se destinan cada año a gasto corriente del hospital, no a inversiones. Tal y como subrayó esta semana el gerente, ese dinero «es del Consorcio Hospitalario no de la Diputación Provincial», por lo que en realidad no está financiando su parte del acelerador, pese al compromiso que adquirió el pasado mes de septiembre. Esa asignación ya está contemplada en el presupuesto del hospital para asumir gasto de material sanitario, medicación y mantenimiento de equipos. Además, se da la circunstancia de que la diputación debía asumir 1,5 millones de euros del coste del acelerador, cuando la aportación anunciada procedente de fondos del ministerio es de 1,3 millones.
La dirección del hospital tendrá que estudiar ahora de qué manera se articulará el presupuesto para activar la compra del acelerador, teniendo en cuenta que el presidente de la diputación, Javier Moliner, da por cumplido su compromiso económico y no tiene intención de cambiar la fórmula de pago. Presumiblemente, el centro se verá obligado a redirigir la consignación de otras partidas al equipo de radioterapia, aunque aún no se ha aclarado cuál será el arreglo contable que deberá acometer.
Lo que sí dejó claró el gerente es que «los pacientes de cáncer que precisan radioterapia tienen garantizado su tratamiento».
