El Hospital Provincial ha pedido a la Intervención y a los servicios jurídicos de la Diputación de Castelló que se pronuncien sobre el procedimiento seguido por la institución provincial para financiar su parte del acelerador lineal. La dirección del centro quiere que los técnicos evalúen si es correcto o no realizar esta inversión con fondos del Ministerio de Administraciones Públicas para gasto corriente que pertenecen al hospital, tal y como pretende la diputación. Hasta que no esté listo el dictamen de los servicios técnicos, el centro sanitario no continuará con el proceso de compra del equipo de radioterapia, pues para ello debe contar con la partida presupuestaria de 3,1 millones de euros y en la actualidad sólo dispone de 1,6 millones, la parte consignada por la Conselleria de Sanidad.
Con el encargo del dictamen jurídico, el hospital pretende dar solución al problema financiero derivado de la fórmula de pago de la diputación. La institución provincial no ha aportado una partida específica de su propio presupuesto a la compra del acelerador lineal, sino que se ha limitado a transferir los fondos del Estado, sobre los que no interviene, y que se destinan cada año a gasto corriente del hospital, no a inversiones.
La dirección económica del centro dio un toque de atención a la diputación al publicar recientemente un informe en el que advertía de que la asignación procedente del ministerio es de carácter finalista, para asistencia sanitaria, y ya está contemplada en el presupuesto para gastos como material sanitario, medicación y mantenimiento de equipos. Además, «no son fondos propios de la diputación, pues tal y como los reciben los deben transferir al consorcio», señalaba el escrito.
El dinero, por tanto, «es del Consorcio Hospitalario no de la Diputación Provincial», reprochó el gerente, Joaquín Sanchís, por lo que la institución no está financiando su parte del acelerador pese al compromiso adquirido.
Tras la reprimenda, el presidente de la diputación, Javier Moliner, varió ligeramente la fórmula de pago: hace dos semanas destinó los mismos fondos del ministerio, pero en lugar de transferirlos mensualmente, como era habitual, reservó una partida de 1,3 millones en un solo pago. Únicamente cambió el nombre de la transferencia haciendo constar que era para el acelerador, pero los fondos seguían siendo los mismos, reprochan desde el hospital.
Por ello, y teniendo en cuenta que Moliner da por cumplido su compromiso, la dirección del centro sanitario ha solicitado a la Intervención y a los servicios jurídicos de la diputación que aclaren si la fórmula adoptada para la financiación del acelerador es correcta. Si los técnicos de la institución provincial dieran su aval al presidente, con toda probabilidad el hospital tendría que redirigir la consignación que ya ha presupuestado para otras partidas al equipo de radioterapia. En caso contrario, la pelota estaría en el tejado de la diputación, que debería destinar recursos propios a la compra del acelerador. De cualquier modo, desde el hospital garantizan la adquisición del nuevo equipo al considerarlo una necesidad asisencial.
