Venían avisándolo durante las tres últimas semanas. Iniciaron las protestas y movilizaciones el primer miércoles del mes de marzo, cuando ya anunciaron que repetirían las manifestaciones durante todo el mes hasta la llegada del 1 de abril. Si la situación no se había solucionado y las nóminas pendientes de los tres primeros meses de 2016 no se ingresaban durante esta última semana, iniciarían una huelga indefinida a partir del próximo viernes. Y así lo harán, pese a que como confirmaba el delegado de UGT, Simeón París «nos han ingresado la correspondiente al mes de enero, pero eso no soluciona los problemas de muchos de los trabajadores, por lo que si no recibimos ningún pago más entre hoy y mañana, iniciaremos la huelga».

Ayer por la mañana volvieron a concentrarse por última vez a las puertas de la Residencia de la Tercera Edad situada en la calle Einstein de Borriana, donde confirmaron que «se nos ha ingresado el mes de enero, pero nos tememos que tardarán en ingresar los otros dos. El pasado año pasaron seis meses hasta que cobramos la extra de julio». Así lo explicaba una de las trabajadoras del servicio de limpieza del centro, que junto a los de lavandería y mantenimiento de las instalaciones son los tres sectores afectados por los impagos que la empresa concesionaria de los servicios, ACISTER, ha llevado a cabo.

En la concentración de ayer a las puertas del centro de residentes de la tercera edad de Borriana, los ánimos estaban algo más caldeados que hace ahora tres semanas, cuando por primera vez se manifestaron al grito de «Acister, paga ya» o «si no cobramos, no trabajamos». En aquella primera movilización, la mayoría albergaba la esperanza de que la presión de la mayoría de trabajadores de la residencia tuviera su efecto sobre la mercantil a la que se adjudicó la gestión de servicios como los de lavandería, mantenimiento o limpieza. Pese a que la protesta se ha reproducido cada miércoles del mes de marzo a las puertas del centro, la respuesta por parte de Acister se ha limitado a «decirnos que intentarán realizar los pagos cuanto antes, aunque a nosotros no nos sirve, ya que las nóminas no son especialmente altas, y muchos de nosotros tenemos que hacernos cargo de hipotecas, pagos bancarios o simplemente pagarnos el transporte hasta nuestro lugar de trabajo», tal y como lamentaba el delegado sindical, Simeón París.

Impagos desde julio

Los impagos y los retrasos comenzaron a producirse en julio de 2015, ya que la paga extraordinaria que debían percibir todos los trabajadores de los servicios adjudicados a ACISTER tampoco se ingresó hasta pasados seis meses. «Fue la primera señal que vimos que empezaba a marcar que las nóminas podían comenzar a correr peligro. Y así ha sido. Los 43 trabajadores afectados aún están esperando a cobrar los meses de febrero y marzo». En el caso de que durante el día de hoy, la empresa abonara una de las dos nóminas pendientes, la ley obligaría a desconvocar la huelga, aunque, por el momento, no se ha producido ningún movimiento al respecto y, tal y como informaron, mañana día 1 de abril se iniciará la huelga indefinida de los 43 trabajadores de la residencia.