Castelló ha reforzado la protección del cordón dunar de la playa del Serradal acotando la zona de anidamiento del chorlitejo patinegro, una pequeña ave que ha sido víctima de la presión urbanística en el litoral y de la que apenas quedan 30 parejas en la provincia.
Por primera vez, el ayuntamiento ha instalado un balizamiento que cierra el área protegida por el lado de la playa para evitar el acceso a las dunas. La actuación, que comenzó a finales de febrero, también ha permitido recomponer el balizamiento existente para delimitar el acceso a la playa del Serradal a través de los pasillos habilitados.
La concejal de Sostenibilidad, Sara Usó, ha destacado en que con esta medida «se atiende una demanda necesaria para mejorar la protección de la zona protegida de anidamiento del chorlitejo patinegro, una ave que desde 2013 está incluida como vulnerable en el Catálogo Valenciano de Especies Amenazadas».
La actuación ha consistido en la colocación de más de 200 tutores cilíndricos de madera y unos 1.300 metros de cuerda de pita para evitar el paso a la zona de dunas de la playa del Serradal.
El cierre de todo el perímetro dunar instalando balizamiento también por el lado de la playa «es especialmente importante porque los chorlitejos crían en la zona de dunas pero muchos lo hacen en la zona limítrofe entre las dunas y la playa, que es el lado que ahora se delimitado», ha insistido Usó.
Además del balizamiento, también se ha reforzado la información instalando 10 carteles advirtiendo de la presencia de aves nidificantes y pidiendo que se respete la zona protegida. La agrupación local de SEO BirdLife, que por primera vez colabora con el Ayuntamiento de Castelló en esta iniciativa, destaca la importancia de «fomentar la concienciación ciudadana sobre la vulnerabilidad de una especie vulnerable como el chorlitejo patinegro, que en 20 años ha pasado de 330 parejas a solo 30 en toda la provincia, y la necesidad de proteger el hábitat donde nidifican».
