La primera Escuela de Mediación Policial del Instituto Valenciano de Seguridad Pública (Ivaspe), que se ubicará en Vila-real, está más cerca. Así lo anunció el alcalde, José Benlloch, durante la fiesta de Sant Miquel, patrón de la Policía Local, que, como cada año, se celebró en la plaza de Sant Ferran.
Benlloch, quien felicitó a todos los miembros del cuerpo policial por su «entrega a la ciudadanía durante los 365 días del año» y por ser una policía «innovadora, pionera, solidaria, formada y todo un referente», explicó que el próximo 19 de octubre se reunirá con el director de la Agencia de Seguridad y Respuesta ante Emergencias y con representantes de la Universitat Jaume I y de la Policía Local para hablar sobre el convenio que regirá la creación de la escuela, para la que pide una implicación económica adecuada por parte de la Generalitat, en especial por todo lo que supondrá su mantenimiento.
Esta escuela permitirá implantar en Vila-real una extensión permanente del Ivaspe especializada en mediación, «materia en la que somos referente internacional, y que significará tener la primera escuela de toda la Comunitat Valenciana».
El primer edil asegura que «desde el primer momento hemos trabajado para generar el prestigio y el ambiente necesarios para que fuese una realidad y, en estos momentos, podemos decir que estamos en unas condiciones muy buenas, ya que somos tres entes los implicados: el Ayuntamiento, la Càtedra de Mediació Policial Ciutat de Vila-real, de la UJI, y la Generalitat a través del Ivaspe». Por ello, destacó que "«a escuela ya es una realidad, porque atrae a muchísimas personas hasta la ciudad, sólo el año pasado contamos con 1.000 alumnos y ello supone un importante impacto económico para Vila-real, ya que los asistentes hacen intenso uso de nuestros servicios hosteleros».
La idea es que la jefatura de la Policía Local albergue, por el momento, la escuela y, posteriormente, si toma una gran dimensión en cuanto al número de alumnos, «que estamos seguros que lo hará, nos plantearemos otros espacios donde ubicarla», apunta Benlloch. «La Biblioteca Universitària del Coneixement (BUC), que es sede de la Seu de la Plana de la UJI, sería un lugar ideal para el futuro», manifiesta.
No obstante, el primer edil también hace hincapié en la necesidad de implicar a la Generalitat a la hora de sufragar el proyecto. «Necesitamos financiación de otros entes porque el ayuntamiento solo no puede asumir estas iniciativas», afirma. «Vila-real no se está centrando únicamente en gestionar el día a día de la ciudad, que desde hace cinco años se está abriendo al mundo a través de un nuevo proyecto para generar recursos, oportunidades, empleo, economía y conocimiento», destaca.
Por ello, la Generalitat «debería ayudarnos a sufragar el mantenimiento de las infraestructuras, el profesorado o cualquier cambio que se produzca durante el crecimiento del proyecto», asegura José Benlloch, quien añade que «todo está encima de la mesa y contemplado en nuestro plan, pero vamos a ser, como siempre, responsables y sensatos y vamos a ir caminando a medida que todo avance».
