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¿Nos vamos?

Un recorrido ameno y divertido por la Fira d'Onda

Disfrutar del multitudinario almuerzo o acudir a las actuaciones musicales son actividades indispensables

Un recorrido ameno y divertido por la Fira d'Onda

Esta es una ruta para hacer de hoy para mañana, literalmente. Este sábado llega el día más grande para los ondenses dentro de su semana de fiestas de octubre, el «dissabte de Fira», donde el almuerzo más copioso de toda la provincia sirve para coger fuerza a una jornada que terminará cuando tu cuerpo quiera.

Coge el coche, o mejor el taxi o el autobús. Si escoges la primera opción, aparca donde puedas porque el municipio prevé la asistencia de cientos de visitantes. Eso sí, no lo hagas tras la primera rotonda de «bienvenido a Onda» de la CV-20, porque todavía te quedan unas glorietas y unos cuantos kilómetros para llegar al casco urbano. Una vez te adentres, lo sabrás, y una vez bajes del coche, lo sentirás, o más bien lo escucharás, porque la música no parará de sonar durante todo el día.

Si eres de los que te gusta correr a primera hora de la mañana y tampoco te importa coger algún riesgo, puedes participar en el encierro-desencierro que tendrá lugar a las ocho de la mañana y que abrirá el cartel taurino de la semana.

Empiezas a correr en la Safona, y si estás en forma, puedes llegar al Raval de Sant Josep. Habrás recorrido 777 metros, pero coge aire y respira, porque los toros, y los que corredores que quieran, pueden volver a correrlo a la inversa. También con toros, por supuesto, en concreto los de Fernando Machancoses.

Hayas decidido o no correr, llega una hora en que te apetece tomar algo. Si tienes la suerte de encontrar algún restaurante o bar libre, aprovecha porque suelen llenarse hasta la bandera. Los menús, en ocasiones, no son de boda, pero sí de bautizo. Si es tu primera vez en Onda, confirmarás tu asistencia para el año que viene.

Los bares, los casales, la calle? todo está a rebosar de gente, casi tanto como los vasos que se llenan y se vacían como por arte de magia. Pero la multitud continúa, y el hechizo, también. Así van los peñistas, como los niños junto al flautista de Hamelín, pero los primeros son de todas las edades, y el segundo ha multiplicado su presencia y cambiado su instrumento por las trompetas, tambores y otros utensilios de charanga.

Consejos para el vestuario

Si eres de fuera de Onda se notará. Posiblemente te vestirás con tus vaqueros y tu camisa planchada, perfecto para una gran jornada festiva. No te preocupes, los lugareños son hospitalarios ese día, y además tampoco les importa alegrarse la vista con alguien elegante a lo largo del día. Algunos de ellos incluso también lo hacen, pero si quieres pasar desapercibido colócate el pantalón y camisa más colorido y/o estrafalario que tengas, y si quieres apostar sobre seguro no te limpies la bebida que te caiga encima o que más o menos sin querer te tiren. Los lamparones son medallas, y necesitarás ser un campeón para aguantar tantas horas. Eso sí, no te esfuerces demasiado, porque al día siguiente puede que tengas agujetas, sobre todo en la cabeza.

Encontrarás muchos sitios y personas a lo largo de la jornada de mañana. A los Chichos y otras rumbas en la plaza de España, a las orquestas en cualquier esquina, a los toros (dos de Torrestrella y uno de Jandilla) en el recinto taurino, todo ello por la tarde, y por la noche, a la Raíz (que ya la liaron en el Viñarock y en el Arenal) en el pabellón Vila d'Onda, a no ser que, valiendo la redundancia (a esas horas vale casi cualquier cosa) se hayan echado raíces en otro sitio, aunque si notas que ya te has pasado con el riego... coge un taxi, y a casa.

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