El Ayuntamiento de Orpesa aprobó ayer unos presupuestos para el ejercicio 2017 de 18,4 millones de euros con los votos favorables del Partido Popular, que gobierna en minoría, y la abstención de Sí se Puede. PSPV, Compromís y Ciudadanos, que presentaron enmiendas, los rechazaron. El gobierno local confía en incrementar las partidas de las concejalías y las inversiones con el remanente de tesorería. El presupuesto cuenta con un informe desfavorable de Intervención por los pagos de las productividades y el cálculo de las pagas extra.

La partida más cuantiosa en el apartado de ingresos proviene del IBI, concepto por el que se espera recaudar 12'5 millones de euros. Este tributo representa el 67% del total de ingresos. La previsión de ingresos por las plusvalías está cifrada en 900.000 euros menos que en 2016, al pasar de 1'7 millones a 800.000 euros, «como consecuencia de la especial dificultad que tenemos para el cobro de este impuesto», se especifica en la memoria de alcaldía. Además, se mantiene por cuarto año consecutivo la derogación de la tasa de basuras.

La partida de Personal, con 7,5 millones de euros, supone el 41% del gasto total. Las inversiones reales son de 1'5 millones de euros e incluyen las obras de accesibilidad en calles que formarán parte de los POYS, la urbanización de una manzana del polígono industrial o la adecuación de la segunda planta del museo. «Las partidas son para trabajar los primeros meses del año y se completarán con el remanente», dijo el alcalde Rafael Albert. Se destinaron 572.000 euros para hacer frente al posible primer pago de la indemnización del edificio Bernat.

Personal de confianza

El el Partido Popular trajo al pleno la creación de una plaza de personal eventual para desempeñar las tareas de gabinete de alcaldía con un salario de 2.250 euros brutos con dos pagas extraordinarias, que contó con el voto favorable de Sí se Puede. La formación de Arantxa Martínez vetó esta plaza al inicio de legislatura y la tachó de «innecesaria». Además, Martínez apoyó el cambio de horario de los plenos para pasarlos a la mañana. «Cuando uno no hace bien las cosas, hay que rectificar», dijo la concejala de Sí se Puede.

Por otro lado, PP y Sí se Puede votaron a favor de quitar las limitaciones para que los concejales que no tengan dedicación, tanto de la oposición como del gobierno, cobren todas las asistencias a los plenos y comisiones, que en la actualidad se restringían a una por mes.