El Fondo de Cooperación Municipal que va a regular la Generalitat y que cuenta con el apoyo de las diputaciones de Castelló y Valencia transferirá hasta un máximo de 14,5 millones de euros en los municipios de la provincia de Castelló.
No obstante, el Consell ha tenido que modificar su plan inicial para que la Diputación de Castelló aceptara su participación en el plan y los criterios serán diferentes en esta provincia. El Fondo fue aprobado por las instituciones en el año 2000, pero hasta ahora no se había desarrollado normativamente ni se le había dotado de partida presupuestaria.
En este sentido, el dinero que la Generalitat transferirá a los municipios está condicionado por criterios poblacionales que no son los mismos que los que aplicará la diputación. La administración valenciana ingresará un mínimo de 3.000 euros a todos los municipios y añadirá una cantidad en función del número de habitantes diseccionada en 9 tramos demográficos.
De esta manera, Castell de Cabres, con 16 habitantes, recibirá 3.064 euros, mientras que Sant Mateu (1.995 hab.) obtendrá 8.958 euros y Benicàssim (18.098 hab.) 21.098 ?.
Estos fondos son discrecionales y los responsables municipales podrán destinarlos a aquellas partidas que consideren necesarias, incluso las de los capítulos 1 y 2 de los presupuestos, que son las dedicadas a gastos de personal y de funcionamiento. Tanto los responsables políticos de la Generalitat como de la Diputación de Castelló manifestaron la voluntad de que el Fondo se prolongue a toda la legislatura para que los municipios puedan acometer con seguridad proyectos plurianuales.
Condiciones de la diputación
El presidente de la Diputación de Castelló, Javier Moliner, y su equipo de gobierno realizaron diversas manifestaciones públicas en contra de la aprobación del Fondo de Cooperación Municipal, pero en silencio negociaron con la Dirección General de Administraciones Públicas su participación en él, aunque con sus propias condiciones.
Éstas fueron consensuadas con los grupos de la oposición en la diputación y al final, el pleno las aprobó por unanimidad. Por un lado, el acuerdo deja en el olvido el conflicto con los municipios de más de 20.000 habitantes, que recibirán una cantidad fija de la diputación en las mismas condiciones que la de la Generalitat. Por ejemplo, Castelló obtendrá de la entidad provincial 225.000 euros y de la administración valenciana 686.676 euros, mientras que Onda recibirá 150.000 de la diputación y 102.852 del Consell.
La situación cambia para el resto de municipios. La diputación ha establecido tres criterios de subvenciones. El primero, dividido por tramos demográficos que oscilan desde los 0 a 100 habitantes, que recibirán un máximo subvencionable de 50.000 euros, hasta los que se encuentran entre los 5.000 y los 20.000 habitantes, que percibirán hasta un máximo de 90.000 euros.
No obstante, de esta cantidad, el Plan de Cooperación Castellón 135 obliga a que el 70% se destine a «inversiones reales», es decir, a obras, mientras que el 30% es de libre disposición. Esto significa que Segorbe, que recibiría 90.000 euros deberá destinar 63.000 a obras y 27.000 de libre disposición.
Así mismo, el Plan guarda 1,4 millones de euros para que los municipios puedan destinar obras en función de las pedanías que gestionen y también destina una cantidad que discrimina en función de la superficie del término municipal.
