Llegó en el peor momento. La primera derrota del Villarreal C en 2017 llegó la semana antes de descansar por exigencias del calendario. El segundo filial amarillo fue presa de sus imprecisiones en el campo de un Rayo Ibense que mostró gran efectividad y saber estar. Ahora la escuadra que entrena Carlos Pérez Salvachúa deberá esperar acontecimientos para ver si conserva o no plaza entre los cuatro primeros.

Hubo gran cantidad de ocasiones. El filial tocó y tocó, y entró en el área de la escuadra alicantina, pero sin fortuna. Andrei (min. 3), Chepe (minutos 6, 13 y 17) o el goleador Darío Poveda (minutos 16 y 20) no remataron la faena. También tuvo mucho trabajo el portero zaragozano Diego Fuoli. El verdugo amarillo, Rafa Pina, avisó en tres ocasiones antes de anotar.

En el segundo tiempo más de lo mismo. El partido estaba muy abierto. El Villarreal C arrancó con llegada y con intentos fallidos, como el de Darío (min. 47), Belizón (min. 52) o de Chepe (min. 60). Hasta que a los pocos minutos de ingresar al terreno de juego, el norteamericano Mukwelle Akale logró perforar la portería local defendida por Edu García. Fue un espejismo. Así las cosas, en el minuto 71 Javo puso el 2-1 y se le hizo de noche al conjunto de la Plana Baixa. El duelo se abrió aún más. Simón y Darío las volvieron a tener, pero el filial fue cazado en una contra en el minuto 83 y Rafa Pina puso el 3-1 final.