La Piscina Provincial de Castelló cerrará sus puertas en unos meses. Aiguagest SL, empresa concesionaria de la explotación hasta el 27 de noviembre de 2023, se ha declarado en concurso de acreedores, iniciando la liquidación de sus activos. Así se lo ha hecho saber a los más de 30 profesionales que actualmente trabajan en la instalación deportiva, a los que ha invitado a marcharse antes de proceder a su despido en breve, ya que no podrá asumir sus finiquitos, teniendo los empleados que acudir al Fondo de Garantía Social (Fogasa) para percibir las cuantías correspondientes.
El cierre de la piscina está fijado, presumiblemente, para antes del verano, salvo que la Diputación de Castelló, propietaria del inmueble, lo evite con una nueva concesión. En caso contrario, como todo apunta, los 1.800 socios tendrán que buscar un nueva instalación en la ciudad para practicar deporte, habida cuenta que no se ofrecerá ningún tipo de servicio a partir de esa fecha.
El centro no acepta pagos largos
A los usuarios habituales de la infraestructura todavía no se les ha comunicado oficialmente la medida. Sin embargo, desde la dirección del centro se ha dado orden de no aceptar los ingresos trimestrales y semestrales por el abono, una práctica habitual hasta ahora y que entraba dentro de las diferentes modalidades de pago por el carné de socio.
Con el concurso de acreedores, acreditando así las reiteradas pérdidas en los últimos ejercicios, Aiguagest evitará la penalización por incumplimiento de contrato, tal cual se recoge en una de las cláusulas del convenio de explotación, que subraya que la rescisión unilateral por una de las partes implicará una multa económica. No obstante, contempla la exención si queda demostrada una situación de merma, como ocurre en este supuesto al desembocar en la liquidación de la mercantil.
Aiguagest SL logró la adjudicación de la Piscina Provincial el 28 de octubre de 2003 al ganar el concurso como integrante de una UTE de la que también formaban parte Servei d´Ensenyament i Assessorament Esportiu SL (Seae) y la Federación de Deportes Adaptados de la Comunitat Valenciana (Fesa). La concesión se prolongaba hasta los 20 años, con un canon de explotación de 66.000 euros anuales, como cantidad fija, y un porcentaje variable sobre los beneficios después de impuestos.
El 21 de marzo de 2014 el pleno de la diputación aprobó la cesión del contrato a la citada Aiguagest tras deshacerse la UTE.
Se da la coincidencia que en los primeros años de gestión de la instalación deportiva, en la última etapa de Carlos Fabra al frente de la Diputación de Castelló (se despidió como presidente en el pleno del 31 de mayo de 2011), el resultado al cierre de cada ejercicio era positivo o reflejaba equilibrio financiero entre las cuentas de gastos e ingresos (0 euros).
A partir de 2012, primer año completo de Javier Moliner como máximo responsable provincial, las perdidas reincidieron año tras año, alcanzado un acumulado de 313.743,96 euros en 2015, según un informe económico sobre la situación de la piscina y que ha servido a la concesionaria para solicitar ante el juez el concurso de acreedores.
