Es muy testarudo. Gran persona, pero testarudo. Y quiere ser futbolista. Jordi García, consciente de las dificultades que se encuentran en territorio español, hace dos años decidió emprender aventura en la isla de Malta, para jugar en la Segunda División de ese país, en el Lija Athletic. Y lo curioso de todo es que para este campaña en curso, la 2017-18, ha decidido irse mucho más lejos. Hasta Mongolia, para jugar en el Ulaanbaatar City de la máxima categoría. Allí está. A finales de la semana pasada firmó su contrato y fue presentado.

Salió de la cantera del Villarreal, pasó por el Almazora y el Castellón, donde llegó a debutar en Tercera la temporada 2014-15. Pero no se apostó por él. Así que hizo las maletas y se marchó a Malta. En concreto en la ciudad de Lija, para enrolarse en las filas del Lija Athletic, de la Segunda. Allí, en su primer año, marcó 21 goles en 25 partidos (23 como titular). Se quedó un año más. Las lesiones le minaron un poco: 21 partidos (17 como titular) y 17 goles marcados. Logró el ascenso de categoría, a la máxima competición, pero no renovó.

Terminada la temporada se le presentó la oportunidad de cambiar de aires, pero mucho más lejos de su Castelló, donde nació un 13 de octubre de 1993. Su siguiente destino fue la capital de Mongolia: Ullan Bator. Allí está el club Ulaanbaatar City que juega en la máxima categoría. Tras dos semanas a prueba, se ha quedado allí.