El Villarreal CF está en vilo por saber si podrá jugar ante el Celta con Carlos Bacca como único delantero nato o, por el contrario, el técnico Javi Calleja deberá ingeniárselas para apostar por el mejor once que considere a tenor de las múltiples ausencias con las que el equipo villarrealense afronta la cita de mañana en Balaídos.

Con Cédric Bakambu y Dani Raba castigados con un partido de sanción -el primero por acumulación de cartulinas amarillas y el segundo por su expulsión ante el FC Barcelona- y con Nicola Sansone lesionado, el Villarreal solo podía contar con el delantero colombiano en punta de ataque para el encuentro de mañana. Sin embargo, Bacca arrastra problemas musculares durante toda la semana y no se ha ejercitado junto al resto de sus compañeros ningún día.

Será hoy, en la última sesión preparatoria previa al encuentro, cuando el cuerpo técnico, los servicios médicos del primer equipo y el propio jugador decidan si este último está para jugar o mejor debe descansar el fin de semana para afrontar recuperado el encuentro del próximo fin de semana ante el Valencia.

En caso de que Bacca no llegue para el choque en Balaídos, el plantel de la Plana Baixa se queda sin delanteros puros y serán otros jugadores del perfil de Pablo Fornals -ya recuperado- o Roberto Soriano los que asuman el trabajo ofensivo del equipo en el encuentro contra el Celta de Vigo de mañana por la tarde.

Si esto acaba sucediendo, no será la primera vez que ocurre puesto que en el Villarreal ya saben lo que es jugar sin delanteros un partido oficial. La última vez que esto ocurrió fue en los octavos de final de la Liga de Campeones en la temporada 2011-12 en la que el conjunto amarillo dijo adiós al perder contra el Manchester City.

En aquel encuentro disputado el 2 de noviembre de 2011, el equipo que por entonces entrenaba Juan Carlos Garrido llegó muy mermado por las bajas ya que estaban lesionados Nilmar, Senna, Marco Ruben, Ángel, Zapata, Rossi, Cani y Camuñas.

El entrenador valenciano apostó por un once con Diego López, Mario, Gonzalo, Musacchio y Catalá en defensa; Borja Valero, Marchena, De Guzmán y Wakaso en el centro del campo y por las bandas, y Hernán Pérez y Joselu, del filia, en ataque.

En el banquillo aguardaban su oportunidad prácticamente todo jugadores del filial como Foto, Carlos Tomás, Marcos Gullón, Joan Oriol o Gerard Bordas, además de César y Ángel López.

Salieron en el segundo tiempo Ángel, Bordas y Joan Oriol, pero el Villarreal no pudo evitar la derrota y cedió ante el Manchester City por 0-3.