Y o no sé aún qué reclaman los vecinos del Crèmor». El concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, contestaba así el lunes 11 de diciembre, durante la presentación del nuevo puente sobre el río Seco, al ser preguntado sobre las quejas de la asociación de vecinos de Sant Joan del Riu Sec que engloba a los vecinos del Crémor. Señor concejal, ¿Todavía no se ha enterado? Resulta paradójico que después de firmar un artículo - « El Com del Pla General de Castelló», donde alababa las bondades del «procés participatiu», el mismo no haya servido para enterarse. Como ya denunciase en días anteriores la asociación, poca participación ciudadana ha habido hasta el momento en la elaboración del PGOU. A pesar de todo, aprovechando esta tribuna, vamos a recordarle las líneas básicas que recogía la propuesta vecinal aprobada por la asamblea de la asociación, registrada en el ayuntamiento y de la cual no hemos tenido más noticias. Esta concluía:

- Se deben respetar todas las edificaciones existentes dándoles un carácter de área semiconsolidada.

-No se abrirán grandes arterias de circulación para que prevalezca el concepto de supermanzana.

- Mantener el arbolado de interés y desarrollar la zona verde del río.

- Conectarse con el Raval Universitari mediante el nuevo puente y pasarelas ciclopeatonales que uniesen las zonas verdes de ambas márgenes del río.

- Desarrollar la red de carriles bici para completar la conectividad con las zonas adyacentes.

- Recuperar el carácter vertebrador del camino del Crèmor transformándolo en una vía verde semipeatonal que sea el eje central del barrio y la conexión entre el centro de Castellón y el Raval Universitario.

Aprovechando la cercanía de la Navidad y el espíritu navideño que debe primar en estas fechas, diremos que muchos son los puntos en común con la filosofía que manifiesta el equipo de gobierno y sus técnicos al publicitar el Plan General. Hablamos de respetar y rehabilitar las edificaciones existentes, pero el ayuntamiento le da un tratamiento muy diferente a unos vecinos respecto de otros en el plan general estructural. Coincidimos en el concepto de supermanzana, pero nuestra propuesta lo plasma y no trocea la zona con avenidas de 20 metros de ancho ya planificadas y que tienen su huella en el PGE.

Queremos desarrollar la zona verde del río, la conectividad entre barrios, pero no queremos gastarnos 1,5 millones de euros en un nuevo puente de la línea de actuación de Edusi, donde vienen descritas las pasarelas sobre el río y los recorridos peatonales. ¿Quedará dinero para el resto de actuaciones destinadas a coser el Raval Universitario con el barrio degradado del Crèmor y la carretera de Alcora? ¿O es que quizás el puente piensa este equipo de gobierno financiarlo con otra línea de actuación? Esperemos que no sea con la destinada a consolidar la ciudad construida que incluye la rehabilitación y revitalización del Crèmor. Esperemos que nadie tenga que rendir cuentas a Europa.

Queremos priorizar el uso ciclopeatonal de nuestro barrio, nadie nos tiene que dar lecciones de esto, todos los vecinos aprendimos a montar en bici y a utilizarla para desplazarnos por el Crèmor. Decía Ignasi García de Compromís, en la presentación del documento de síntesis del nuevo Plan general de Castellón, que este acaba con la degradación del territorio que se preveía antes del estallido de la burbuja inmobiliaria, que se priorizaban las actuaciones de rehabilitación y renovación de los tejidos urbanos. Preguntamos si bloques de seis alturas al lado del camino del Crèmor no es volver a fomentar el ladrillo.

Reflexionen todos. Los vecinos del Crèmor llevan 14 años luchando contra molinos de viento, gigantes si lo prefieren, y nos vemos con un Plan General Estructural que nos muestra una problemática parecida a la que teníamos con el anterior Plan General derogado. Por todo ello, utilizando las palabras del concejal responsable de urbanismo, «reclamamos» a todos los grupos políticos que escuchen a los vecinos de Castellón y en nuestro caso particular el PGE no discrimine a unos vecinos del Crémor respecto de otros, convirtiendo a algunos sus casas, incluso solares vacíos en suelo urbano, mientras que a otros les atraviesan avenidas o les cae encima un bloque de pisos.