La planificación urbanística de los próximos 20 años de Castelló dio ayer un salto significativo con la publicación en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) de la versión inicial del Plan General Estructural (PGE), que supone ahora abrir un plazo de 45 días hábiles -hasta el 21 de marzo- para que los ciudadanos puedan presentar alegaciones en el primer paso de una tramitación que aún se prevé larga. Los vecinos que así lo consideren podrán consultar la documentación de manera presencial en el edificio Quatre Cantons (calle Enmedio, 82) y la Tenencia de Alcaldía del Grau (Paseo Buenavista, 28) en horario de 9:00 a 19:00 horas de lunes a viernes y de 9:00 a 13:00 los sábados por la mañana. Además, la información también está disponible en la web www.plageneralcastello.es, desde donde se podrán realizar, por primera vez, alegaciones vía telemática.

La documentación a la que podrán acceder los interesados se centra en la visión global de la ciudad del futuro, marcando principalmente las clasificaciones de suelo y las infraestructuras generales. Para el detalle, ese en el que cada vecino podrá saber qué va a pasar en su calle, habrá que esperar a la exposición público de la segunda pata de esta nueva planificación urbanística, el Plan de Ordenación Pormenorizada (POP), que aún tardará unos meses en ver la luz.

Pese a todo, cualquier ciudadanos que consulte la documentación podrá hacerse una idea del Castelló por el que apuesta el actual equipo de gobierno, PSPV y Compromís, que en esta primera versión cuenta con el apoyo de sus socios del Pacte del Grau, Castelló en Moviment.

La memoria del Plan General Estructural se marca una meta: procurar el desarrollo económico, turístico e industrial en equilibro con la preservación de los valores naturales y culturales de la ciudad. Ya no es el momento de la expansión urbanística, el criterio será «priorizar actuaciones de rehabilitación y renovación de los tejidos urbanos existentes frente a los nuevos desarrollos, lo que incluye además como prioritario tratar las áreas de regeneración más vulnerables. La apuesta, en términos generales, pasa por una ciudad sostenible, en la que se devuelva el protagonismo al ciudadano dentro de los barrios, facilitando la movilidad ciclopeatonal y devolviendo al peatón la prioridad en la ciudad, integrando además los valores naturales paisajísticos y medioambientales en el entorno urbano y rural.

18 sectores residenciales, 6 terciarios y 7 industriales

En cualquier caso, sí que se diseña un crecimiento inmobiliario, aunque mucho más moderado que en el anulado Plan General del año 2000 que planteó el PP y que tumbó el Tribunal Supremo. El actual equipo de gobierno subraya que se ha desclasificado una parte importante de los suelos urbanizables, tanto residenciales como industriales, que estaban previstos en el plan anterior. En cualquier caso, aunque se insiste en es rehabilitar y renovar las zonas urbanas existentes, el proyecto ahora en exposición pública sí que define un total de 18 sectores residenciales, 6 terciarios y 7 industriales.

En el apartado de los residenciales, estamos hablando de una superficie computable de 1.758.675 metros cuadrados, que suponen una edificabilidad total de 931.968 m2 y que plantean la construcción futura de unas 7.597 viviendas. Aquí destacan - información en el cuadro adjunto- siete sectores que vienen marcados con densidad alta. Para Fernando El Católico se plantean 209 nuevas viviendas en una superficie de casi 25.000 m2, apareciendo con la densidad más elevada de todos (83 viviendas por habitante). Le sigue el sector Río Seco (24SUR), con 1.348 viviendas en 193.777 m2 y después uno de los sectores que pueda dar más batalla en el periodo de alegaciones, Crèmor, con casi 180.000 m2 de superficie y una previsión de construir 1.091 viviendas.

Por lo que respecta a los sectores de suelo urbanizable para desarrollo industrial, hablamos de siete actuaciones: La Pedrera (146.647 m2), Catalá (81.924 m2), Giner (115.419 m2), Pi Gros (34.149 m2), Plataforma Logística (893.490 m2), Lourdes (36.315 m2) y carretera Grao-Almassora (1.106.504 m2).

En relación al suelo urbano, que crecerá ligeramente al pasar de 2.268 a 2.669 hectáreas, distingue actuaciones aisladas, para llevar a cabo la edificación de parcelas o la rehabilitación de edificios, u las actuaciones integradas, que se desarrollarán en el Plan de Ordenación Pormenorizada. Aquí el Plan prevé unas 44 unidades de ejecución residenciales, 8 terciarias y 15 industriales.