n La Diputación de Castelló pagará 52.000 euros por las obras ya finalizadas de la Concatedral de Santa María. Esta cantidad corresponde a una deuda que legó el Consell de la etapa del Partido Popular.
La financiación de esta actuación depende de ocho patronos, entre otros, dos entidades financieras, diputación, ayuntamiento, patronal de Castelló y Cámara de Comercio. La deuda asciende a los 376.000 euros, que se han de devolver por las ocho entidades. La diputación aprobará en el pleno del próximo martes un modificado de crédito para materializar el pago de la parte que le corresponde (52.000 euros), según fuentes de la institución provincial.
Esta cuestión se arrastra de la legislatura anterior. La empresa encargada de las obras presentó en 2016 una demanda de arbitraje contra la parroquia de Santa María, en la que pedía que se le pagarán una deuda inicial de 76.921 euros, más 299.319 euros en concepto de intereses por impago. En mayo de 2017, una sentencia del Juzgado de Primera Instancia nº 2 de Castelló atendió la demanda de la constructora y obligó a la fundación de Santa María a abonar 376.000 euros. La firma ya había realizado anteriormente una quita de la deuda, que llegó a alcanzar el medio millón de euros.
Hace un año, el obispado se comprometió a asumir la mitad de este importe, con lo que al resto de siete patronos le correspondían a cada uno 26.875 euros, pero la cuantía que aprobará la diputación asciende a los 52.000 euros, es decir, apunta que los ocho patronos pagarán a partes iguales.
El equipo de gobierno se mostró en 2017 reacio a aportar esta cantidad por ser una deuda producida por un impago del Gobierno valenciano. Estos 376.000 euros se generaron porque el Consell eludió inyectar 76.000 euros que se comprometió por las obras de la Concatedral de Santa María. Ello propició a su vez unos intereses que elevó la cantidad a deber hasta los 376.000 euros.
