El Ayuntamiento de Castelló solicitará un nuevo crédito de seis millones de euros para garantizar la financiación de 27 inversiones previstas en 2018. Accede a este préstamo porque el Gobierno le obliga a destinar el superávit generado al pago de la deuda. Es una alternativa que puede emprender al tener las cuentas saneadas y que posibilita la puesta en marcha de más inversiones. Al igual que realizó en una anterior operación crediticia, incluye en el pliego de condiciones cláusulas sociales. En las mismas priorizará a las entidades financieras que cedan viviendas sociales o que no desahucien por impagos de hipotecas.

Las bases que regulan la adjudicación de dicho préstamo incluyen cuatro criterios sociales que representan 50 de los 150 puntos de la valoración del proceso. La principal condición es la puesta a disposición de los bancos de viviendas en alquiler social con una renta máxima equivalente al 30 % de los ingresos netos de la unidad familiar y con alta en los suministros necesarios. Al respecto, añade el documento, el plazo mínimo de arrendamiento sería de 3 años desde la ocupación de la familia en riesgo de exclusión social que designaría el propio ayuntamiento.

El consistorio también valorará a las entidades que sean una cooperativa de crédito, que formen parte de la Federación Europea de Bancos Éticos y Alternativos, y que cuenten con una declaración responsable en la que aseguren que no han realizado «desalojos derivados de los procedimientos hipotecarios que determinan directamente la pérdida de la vivienda habitual de las personas que se encuentran en situación de riesgo de exclusión social».

De esta manera, el equipo de gobierno intenta crear una bolsa de alquiler social, aunque de momento las negociaciones que mantenido en este mandato con los bancos para obtener pisos no han fructificado. En un crédito en 2017 de 9 millones firmado para la compra del antiguo cuartel de Tetuán XIV también se introdujeron cláusulas sociales.

Ante las reticencias mantenidas hasta ahora por los bancos para liberar pisos vacíos, el ayuntamiento ha previsto este año un millón de euros para la adquisición de viviendas con una finalidad social. Asimismo, ha lanzado dos planes de ayudas para asistir a personas con problemas económico. Por un lado, aportará 200.000 euros para subvencionar el 40 % de las cargas hipotecarias de familias con escasos recursos, y en segundo lugar, promueve subvenciones para rehabilitar pisos sin ocupar. En este segundo caso, tendrá en cuenta aquellas casas que estén sin uso cuyos propietarios acepten dirigirlas al alquiler social.

Centro de alzhéimer

Con los 6 millones de euros del nuevo crédito, el equipo de gobierno local costeará 27 actuaciones programadas en el presupuesto de 2018. Entre otras iniciativas, ha consignado 440.000 euros para la segunda fase de adecuación del centro de alzhéimer de la Pineda -situado en el antiguo Cuartel de Tetuán XIV-. También un millón euros en los presupuestos participativos, 945.000 para la obtención de viviendas sociales, 240.000 en la remodelación del edificio de Quatre Cantons y 380.000 en la mejora de centros deportivos.