La rectora electa mostró su satisfacción por el nivel global de apoyo a su candidatura y destacó que se abre «una nueva etapa muy ilusionante en la que queremos dar un nuevo impulso a nuestra universidad, y lo vamos a hacer con el amplio apoyo que hemos recibido de los colectivos universitarios».

Alcón resaltó especialmente el aumento de la participación del alumnado y subrayó que es un «récord histórico». Explicó que ha pasado del 3, 3 % en 2010 y el 5, 6 % en 2014 al 8,76 % en el día de ayer.

No obstante, admitió que «tenemos que seguir trabajando por involucrar al estudiantado en la vida universitaria, y esto es algo que haremos entre todas y todos en estos próximos cuatro años».

La catedrática de Filología Inglesa valoró también el trabajo hecho por las diferentes candidaturas en redes sociales, y la posibilidad del voto electrónico y, en este sentido, manifestó que hay que seguir avanzando en esta línea, trabajando para que la plataforma de votación sea todavía más intuitiva y que se extienda el plazo para la votación online.

Otro motivo de satisfacción ha sido el amplio apoyo recibido a la Candidatura per l´UJI, que ha obtenido 68 de claustrales, de un total 71 por el colectivo de PDI Funcionario, 13 de 14 por el colectivo de PDI Laboral, y la becaria que se presentaba.

A partir de hoy, la nueva rectora inicia una nueva etapa en la UJI. Será la sexta rectora de la Universitat de Castelló, siendo la primera mujer que ostenta este cargo. Los cinco rectores que la precedieron la arroparon el miércoles en un acto de su candidatura en el Menador.

Alcón deberá hacer frente a la «herencia» de su antecesor, Vicent Climent: acabar la facultad de Ciencias de la Salud, la renovación del Consell Social y el requisito lingüístico. En relación a este último, la ya rectora anunció la no obligatoriedad del C1 (mitjà) como condición necesaria para la obtención de ciertos títulos, eso sí, sin abandonar la promoción del valenciano.

Más financiación

Otro objetivo clave para Alcón es conseguir un nuevo modelo de financiación que dote a la UJI de estabilidad y se equipare al resto de las universidades públicas de la Comunitat Valenciana.