Los vecinos de Polop de la Marina rechazaron ayer el asesinato del ex alcalde de la localidad Alejandro Ponsoda, "tres años después de que le dispararan tres tiros", según indicó la actual alcaldesa, María Dolores Zaragoza, quien señaló que "no hay derecho a que asesinen a nadie".
Así, cerca de medio millar de ciudadanos de este municipio alicantino, de unos 4.000 habitantes, se manifestaron en repulsa del asesinato de Ponsoda, fallecido el 27 de octubre de 2007 días después de haber sido tiroteado en la puerta de su domicilio.
Durante la manifestación, María Dolores Zaragoza declaró que la muerte de su compañero del consistorio "no es algo difícil de superar", si bien ha indicado que "el pueblo día a día sigue bien" y "adelante".
"Todo el mundo tiene ganas de saber lo ocurrido", reclamó Zaragoza, quien mostró su "plena confianza" en la labor de la Justicia. Entre los vecinos de la localidad, también se encontraban miembros de la corporación municipal, así como funcionarios del consistorio polopino.
En la noche del 19 de octubre de 2007 Alejando Ponsoda recibió varios tiros en la puerta de su casa, situada en la pedanía polopina de Xirles, impactos que produjeron su muerte el 27 de octubre, después de permanecer varios días ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital General de Alicante. La investigación de los hechos se saldó con la primera detención relacionada con el caso dos años después, en concreto, el 5 de noviembre de 2009. Entre los siete detenidos en relación con el crimen, se encontraba también su sucesor en el cargo, el ex alcalde Juan Cano, quien salió de prisión el pasado 30 de julio, donde permanecía desde noviembre de 2009. La salida de prisión de Cano tuvo lugar tras pagar una fianza de 20.000 euros, impuesta por la titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de la Vila Joiosa.
