Xàbia fue el primer municipio de la C. Valenciana que consiguió que el Consell aplicara la medida extraordinaria de suspender parcialmente su obsoleto PGOU de 1990. Esa suspensión está vigente desde el 26 de enero de 2007. El decreto del Gobierno valenciano deja claro que estará en vigor hasta que se apruebe un nuevo Plan General y "como máximo por el periodo de cuatro años".

Así pues, la suspensión de planeamiento agota sus días. El próximo miércoles cumplirá cuatro años y el actual gobierno local (Bloc-Centristes, PP y CpJ) no tiene a punto el nuevo Plan General. El pasado mes de julio aprobó y envió a la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda el documento consultivo, que no es más que un primer avance de PGOU.

Al caducar la suspensión del planeamiento, Xàbia volverá al urbanismo de hace 20 años. Sectores que está previsto desclasificar como el del Saladar recuperarán la desfasada calificación de suelo urbanizable no programado.

Pero es evidente que el gobierno local acudirá a la conselleria para que prorrogue la medida excepcional de la suspensión de licencias.

Nueva Jávea, que está en la oposición junto al PSPV, denunció ayer que "la inoperancia e incompetencia" del Bloc-Centristes y el PP no pueden tener como consecuencia que una situación extraordinaria se prolongue sine die. El portavoz de Nueva Jávea Paco Catalá ya avanzó ayer que su partido se opondrá a que se amplíe la paralización de permisos de obra. Catalá dijo que no se puede ahogar todavía más al sector de la construcción. Durante estos últimos años, sostuvo el edil, los constructores no han podido ni siquiera ejecutar pequeñas obras o reformas. Aseguró que hay amplia jurisprudencia contraria a que se prorrogue una situación "lesiva" para la economía local.