S. S., Gandia

El Ministerio de Fomento se está encontrando con más problemas de los esperados en la ejecución de la primera fase del proyecto consistente en el desdoblamiento de la carretera nacional 332 entre Gandia y Xeresa. Si el Ayuntamiento de Gandia ha solicitado que se tenga en cuenta la presencia de un canal de riego construido a principios del siglo XV y se evite su destrucción, ayer el alcalde de Xeresa, José Ferragud, confirmó a Levante-EMV que el pasado mes de mayo decretó la paralización de las obras en un tramo concreto de las mismas por la presencia de un ullal que alimenta al marjal de la Safor.

El afloramiento natural de agua, situado a los pies del castillo de Bairén, prácticamente en el límite con el término de Gandia, se encuentra en la zona protegida del marjal de la Safor, cuyas 1.200 hectáreas están incluidas en el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunitat Valenciana.

Ferragud explicó ayer que la presencia del ullal es conocida «únicamente por los vecinos de Xeresa», dado que las facilidades para acceder al mismo llevaron a cubrirlo hace muchos años con el fin de impedir que algún niño pudiese caer a su interior. Ese cubrimiento artificial hace que pase desapercibido, pero permite la salida del agua surgente hacia la zona norte del marjal de la Safor.

El alcalde indicó que la orden de paralización de los trabajos, que se está cumpliendo en la zona donde se ubica el afloramiento de agua, no le viene de nuevo al Ministerio de Fomento, dado que hace más de un año, en mayo de 2005, remitió un informe técnico en el que se anunciaba la presencia de ese elemento para que se adoptaran medidas y no quedara sepultado por el desdoblamiento de la carretera nacional 332.