R. Gallego, Xàtiva
El alcalde de Vallada y presidente de la Diputación de Valencia, Fernando Giner, decidió un día del mes de febrero de 2006 que la relación con la empresa Tec-Fec, SL., impulsora del Parque Estratégico La Mar de Dins que tenía que «solucionar la crisis industrial» del municipio y su comarca, había llegado a su fin. El siguiente paso fue constituir una empresa municipal con un capital de 3.060 euros (Sociedad para la gestión del parque estratñegico empresarial de Vallada) en cuyo consejo de administración sentó al empresario Pedro Cortés García y a su asesor jurídico y secretario del consejo de Egevasa, Francisco Ballester Masià y excluyó a toda la oposición.
Estos dos consejeros son los que mejor han entrado en el negocio del parque empresarial de Vallada. De hecho, la mujer de Francisco Ballester, a través de la empresa Gortal, SL., recibió la pasadas Navidades -en concreto, el 28 de diciembre- el encargo de redactar el proyecto de urbanización de los terrenos a cambio de 490.000 euros. Según consta en la documentación consultada, el ayuntamiento dio siete días hábiles a las empresas para presentar propuestas al concurso, que partía con un presupuesto a la baja de 900.000 euros. Gortal, SL, fue la única que se presentó. Para pagar este contrato, Giner, como presidente de la diputación, se aprobó una subvención de 300.000 euros.
En apenas un mes Gortal, SL., radicada en la calle Ausiàs March de Burjassot, es capaz de tener a punto todo un proyecto de urbanización de 1,3 millones de metros cuadrados. El pleno del 30 de enero de 2007 aprobó exponer a exposición pública el proyecto completo de urbanización del Plan Especial Parque Estratégico Empresarial de Vallada.
Pero la relación de Gortal, SL., con el parque empresarial de Vallada se había iniciado meses antes. En junio de 2006, la arquitecta urbanista Victoria Martí Sancho, administradora única de Gortal, SL., y esposa de Francisco Ballester Masià, firmó el proyecto de expropiación del Plan Especial Estratégico La Mar de Dins de Vallada. Un documento que, según Tec-Fec, SL., que ha demandado al Ayuntamiento de Vallada por importe de 18 millones de euros, es «idéntico» al que presentó a la Conselleria de Territorio para que se aprobara la reclasificación de terrenos. El otro miembro externo que tiene sitio en el consejo de administración de la empresa pública, Pedro Cortés García, empresario y ex presidente del Valencia, es socio de la fima Ardea Saguntum, SL, una de las tres empresas privadas que optan a comprar suelo industrial a precio de expropiación pública. Pedro Cortés, en sociedad con Francisco Muñoz Antonino, ha presentado propuesta para la gestión de una unidad de actuación en suelo calificado como terciario de 47.600 m 2 .
