Ramón Ferrando, Valencia

El Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Fundación Societat i Progrés de Valencia y la asociación La Gavilla Verde (que tiene un ámbito nacional) se han personado en la causa abierta por el juez Baltasar Garzón para investigar las denuncias de colectivos de familiares de desaparecidos. Las dos asociaciones se mostraron ayer contrarias a la apertura indiscriminada de fosas y reclamaron que se realicen exhumaciones individualizadas como reclaman los familiares.

Un grupo de familiares de víctimas de la Guerra Civil y de la represión franquista acudieron ayer a la rueda de prensa convocada por las dos asociaciones. Vicenta Flores, una mujer de 74 años vecina de Valencia, advirtió de que no parará hasta ver a su padre (asesinado en 1939) enterrado con su madre. "Aunque tenga que escarbar, sacaré a mi padre de la fosa. Lo enterraron vivo con cal en un barrero donde sacaban el barro para hacer tinajas en Villarobledo. Mi padre era un labrador que cultivaba las tierras para el amo. Lo mataron porque un vecino lo denunció por ser republicano. Tenía 36 años, cuatro hijos y nunca le hizo nada a nadie", lamentó Vicenta Flores. "Cuanto más pasa el tiempo, más recuerdo lo que pasó. Sólo quiero que lo saquen del barrero", añadió.

Localización de víctimas

Otros familiares no desean remover las fosas comunes, pero sí reclaman que se localice dónde están enterrados sus muertos. Manuela Mazo explicó que tiene a sus familiares enterrados en fosas comunes de Paterna. "Yo no quiero sacarlos, pero sí saber dónde están para honrarlos. El único daño que hicieron fue ser republicanos. No mataron a nadie", declaró Manuela Mazo.

El Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica y la Gavilla Verde pidieron ayer que el juez Baltasar Garzón o un grupo de expertos visiten el cementerio de Valencia y que comprueben la documentación que revela la existencia de varias fosas en la Comunitat.

Los responsables de las dos asociaciones lamentaron la decisión de la Audiencia Nacional de paralizar la apertura ordenada por Garzón de diecinueve fosas por no considerarlo una cuestión urgente. Los dos coincidieron en que "es una falta de respeto a los desaparecidos" y a sus familiares, muchos de los cuales tienen una edad avanzada.

Matías Alonso, portavoz del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica, criticó el recurso interpuesto por la Fiscalía en el que se cuestiona la competencia del juez Garzón en este caso.

El presidente de la Gavilla Verde, Pedro Peinado, anunció que durante 2009 tienen previsto trabajar en las fosas de los municipios de Albalat dels Tarongers y Benagéber -donde van a realizar excavaciones en las que esperan encontrar a una veintena de personas-, en el cementerio municipal de Valencia, en Toledo y en Cuenca. El Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica está investigando la posible existencia de otras fosas en Paterna.

Peinado señaló que pase "lo que pase" con el auto emitido por Garzón, la Gavilla Verde seguirá con los trabajos, para lo que pedirá en los próximos días las subvenciones que el Ministerio de Presidencia ha sacado para colaborar en este tipo de actuaciones.