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El celo del Gobierno a la hora de clausurar los pozos del acuífero de la Mancha oriental, que deberían pasar a mejor vida gracias al plan de sustitución de bombeos por agua del Júcar, no convence ni a ecologistas ni tampoco a los regantes valencianos.
Para el portavoz de Xúquer Viu, Paco Sanz, "no esta claro que se estén cerrando los pozos, y las cifras reales de extracción de agua del acuífero son superiores en casi 100 hm3 al año a las que ofrece la Confederación Hidrográfica".
El secretario de la Unión Sindical de Usuarios del Júcar (USUJ), va más lejos: "Por lo que nosotros sabemos no se cierran los pozos, de hecho no se ha clausurado ni un sólo sondeo en la provincia de Albacete".
Otro aspecto que causa malestar entre los regantes valencianos es que el Gobierno destine 1oo millones a unas obras que "no son prioritarias dentro del Plan del Júcar vigente, que si que considera urgente la modernización del regadío tradicional valenciano".
Valero de Palma explica que en los 9 años que lleva en marcha la primera fase del plan "nunca han podido detraer los 33 hm3 anuales previstos porque no hay agua suficiente". "No tiene ningún sentido invertir ahora 100 millones más en más obras para llevar un caudal que no existe". exige que el Gobierno "destine ese dinero a concluir la modernización del regadío tradicional del Júcar, con la que se espera ahorrar 200 hm3 de agua al año".
