Las Corts Valencianas rechazaron ayer, con los votos en contra del PP y del PSPV-PSOE, la enmienda a la totalidad presentada por Esquerra Unida (EU) a la reforma del Estatuto de Autonomía, con la que se busca que la inversión estatal se equipare al peso de su población en el conjunto de España. El conseller de Gobernación, Serafín Castellano, que defendió la ley en las Corts, explicó que esta modificación permitirá ingresar casi quinientos millones de euros en 2011 y 3.500 millones en los próximos siete años.
La diputada de EU Marga Sanz consideró que esta reforma "abre un falso debate sobre financiación y además acentúa la marginación política de los municipios", por lo que su grupo planteaba en el texto alternativo, que la administración local esté presente en la comisión que negocie el nuevo modelo. Sanz, quien aclaró que su grupo no se opone a que la población sea un criterio en el modelo de financiación, insistió en que esta reforma es un "ejercicio de ilusionismo" que pretende seguir practicando "victimismo estéril".
El diputado socialista Antoni Such, quien ha rechazado al igual que el PP que esta reforma sea el lugar adecuado para hablar de financiación municipal, recordó que su partido siempre defendió que la población fuera un elemento esencial en materia de financiación" y celebró la rectificación del PP.
