En el plazo de dos años, el Alt Maestrat podría presentar un paisaje insólito con torres de petróleo emergiendo por doquier al más puro estilo tejano. Eso es al menos lo que pretende Montero Energy, una empresa filial de la canadiense R2 Energy, interesada en emprender una serie de sondeos para extraer el crudo que, según todos los indicios, hay en las entrañas de las comarcas del interior de Castelló.
El procedimiento y la tecnología que empleará la multinacional es todavía un asunto «confidencial» y hasta que el Consell no conceda las autorizaciones se mantendrá en secreto, según explica Rafael López, jefe de Exploración de Montero Energy. «Todo lo que vayamos a hacer se hará con total transparencia y siguiendo los pasos que nos marquen la ley y la Conselleria de Medio Ambiente», asegura López.
La extracción de petróleo es un proceso caro y complicado y aunque los avances tecnológicos han permitido reducir algunos factores de riesgo, no han logrado encontrar un método que permita detectar la presencia de hidrocarburos con un cien por cien de seguridad. Es por ello que el Gobierno valenciano ha acogido con prudencia la noticia de R2 Energy.
Unos, los ecologistas, aseguran que estas técnicas supondrán un impacto negativo para la zona, demasiado castigada ya por los aerogeneradores eólicos. Otros, los «petroleros», creen que extraer crudo supondría una gran noticia en tiempos de crisis y llevaría cientos de puestos de trabajo a las 40 localidades que van a ser exploradas en los próximos años.
Hoy día, la única manera de saber realmente si hay petróleo en la zona es mediante la perforación efectiva de un pozo. La profundidad a la que se llegará dependerá de la composición de los estratos geológicos del Maestrat.
La etapa de perforación se iniciaría acondicionando el terreno mediante la construcción de una «planchada» (explanada para el pozo) y caminos de acceso, puesto que el equipo de perforación movilizaría herramientas y vehículos voluminosos y pesados. Los primeros pozos serían de carácter exploratorio, posteriormente vendrían los de explotación. Antes de abrir el pozo exploratorio se recogería variada información: tipo de perforación, perfil del pozo abierto, obtención de muestras y cementación.
De acuerdo con la profundidad y las condiciones propias del subsuelo del Maestrat, se seleccionaría el equipo de perforación más adecuado. Hay diversas formas de efectuar esta operación, pero el modo más eficiente y moderno es la perforación rotatoria o «trepanación» con circulación de barro. El equipo de perforación consistiría en una torre de unos 20 o 30 metros de altura, que soportaría un conglomerado de tuberías, herramientas y motores a explosión o eléctricos. Este conjunto impulsaría una columna perforadora conectada a una tubería especial para canalizar el crudo.
Dureza de la roca
La rapidez con que se horada va en función de la dureza de la roca. A veces, el «trépano» (perforador) puede calar 60 metros por hora; sin embargo, en un estrato muy duro, es posible que sólo avance 30 o 35 centímetros. Los fluidos que se emplearían en la perforación de un pozo se administrarían mediante el llamado sistema de circulación e inyección. Como fluidos base de perforación en la tierra se utilizarían distintos elementos líquidos y gaseosos aún por determinar. Ésta es la fase más polémica, ya que uno de los métodos utilizados -el «fracking» o fractura hidráulica-, consiste en inyectar arena y químicos en el subsuelo, lo que para los grupos ecologistas supone un atentado al medio ambiente. La empresa ya ha solicitado permisos en otras zonas de España para llevar a cabo prospecciones similares y grupos de ciudadanos se han rebelado contra sus métodos.
Todavía se desconoce qué tipo de pozo se abriría en el Maestrat. Existen varios tipos: vertical, horizontal o formado por ambas estructuras. Los primeros pozos múltiples fueron perforados en la URSS en la década de los 50.
Experto en Políticas y viajero infatigable
Ian Telfer, presidente de Goldcorp, factura más de 54.000 millones de dólares en Wall Street. Está considerado uno de los grandes magnates de la energía en América del Norte. Es el verdadero precursor del proyecto. Éste es su perfil.
Edad: 65 años.
Nacido en Oxford, Inglaterra. Su padre era piloto de la RAF (después contable) y su madre una maestra de escuela de la localidad de Moose Jaw. Se trasladó a Canadá cuando tenía dos años. Vivió en Moose Jaw durante 5 años antes de establecerse en el área de Toronto Downsview, donde se crió finalmente.
Familia: Casado desde hace 34 años con Nancy Burke. Dos hijos.
Educación: Ciencias Políticas por la Universidad de Toronto.
Títulos actuales: Presidente de Goldcorp Inc., Uranium One Inc. y The World Gold Council.
Número de países que ha visitado: Ochenta.
