El penúltimo día del año trajo ayer malas noticias del Ministerio de Hacienda sobre la situación de las finanzas de la Generalitat. El departamento que dirige Cristóbal Montoro hizo públicas las cifras de déficit, en términos de contabilidad nacional, correspondientes al mes de octubre, que revelan que en los diez primeros meses del año el Ejecutivo de Alberto Fabra gastó 1.314 millones más de lo que ingresó. El informe pone en evidencia que octubre fue un mes negro, ya que en solo 31 días el desfase entre los ingresos y los gastos no financieros se disparó en 289 millones, un 28 % más que el existente hasta septiembre, 1.025 millones, según los datos proporcionados por el propio ministerio hace un mes.

El dato representa el 1,35 % del PIB valenciano, por encima del 1,30 % para todo el año fijado por el Gobierno para el conjunto de las comunidades autónomas aunque por debajo del 1,60 % del tope de déficit flexibilizado que el Ejecutivo central otorgó a la C. Valenciana. No obstante, ese porcentaje hasta octubre anticipa que el Consell no podrá cumplir a final de año con el límite del 1,60 % y se quedará en torno al 2 %, quizá algo por encima. En septiembre el déficit era del 1,05 %, por debajo del 1,13 % en el mismo mes de 2012, año que acabó con un desfase del 3,69 %. La razón es que muchos gastos se anotan en los últimos meses del año, especialmente en diciembre, y en concreto, los referidos al sector público.

La inevitable traducción de las áridas cifras es que comportarán nuevos ajustes del Consell. De hecho, con los números de septiembre, el ministerio de Montoro ya remitió un «requerimiento» al Gobierno valenciano para que aplique más recortes con el fin de cumplir el objetivo de déficit. Otras tres comunidades, Cataluña, Murcia y Andalucía, recibieron también requerimientos para que se aprieten más el cinturón.

Con el 1,35 %, la Generalitat fue el cuarto ejecutivo autonómico con mayor desfase, sólo superado por Murcia (2,05 % de su PIB), Cataluña (1,60) y Aragón (1,38). Navarra registra el 2,12 %, pero el ministerio aclara que este dato no es homogéneo. Ello es debido a su privilegiado sistema foral de financiación. Tras la C. Valenciana, le siguen Madrid (1,11), Castilla-La Mancha (1,10), Andalucía (1,02), Galicia (0,96), País Vasco (0,89), Cantabria (0,65), Castilla y León (0,62), Extremadura (0,50), Canarias (0,44), Baleares (0,30) y Asturias (0,16). Todas registraron déficit salvo La Rioja, la única con equilibrio entre ingresos y gastos. En cifras absolutas, el descuadre de la C. Valenciana es también el cuarto. Le superan Cataluña, con 3.065 millones; Madrid, 2.047; y Andalucía, 1.412. Tras el Consell, a gran distancia, figura País Vasco, con 565 millones.

El 23 % del aumento del déficit

En conjunto, las comunidades acumularon un déficit hasta octubre de 11.489 millones, frente a los 10.220 hasta septiembre. Una subida de 1.269 millones del que el aumento del desfase del Consell (los citados 289 millones) absorbe el 22,7 %, casi la cuarta parte del incremento de los números rojos de todas las autonomías. Cada día de octubre, el déficit de la Generalitat creció en 9,3 millones. Los 11.489 millones del total equivalen al 1,12 % del PIB nacional, lo que para el ministerio es «coherente» con el límite del 1,30 % para todas las comunidades.

Con todo, los números rojos de la C. Valenciana se han ralentizado. Así, en octubre de 2012, en términos presupuestarios no incluyen los ajustes de contabilidad nacional, el Consell tenía un déficit del 1,37 % del PIB, la diferencia de 1.375 millones entre ingresos y gastos. En octubre de 2013, el desfase es del 1,26 % y 1.232 millones. Es el resultado de unos ingresos presupuestarios no financieros de 8.778 millones y unos gastos de 10.010 millones.