Radiotelevisió Valenciana (RTVV) y el comité de empresa ultimaron anoche un preacuerdo para los 1.600 empleados afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE). La empresa y el Consell aceptaron indemnizar a la plantilla con 35 días por año trabajado y 30 mensualidades. Esta era la primera exigencia en la propuesta del comité de empresa, que un día antes había sido rechazada por los liquidadores y los consultores de KPMG. Solo esta cláusula supondrá un coste de 75,8 millones de euros.

La última reunión, comenzada a las 16.30 horas, continuaba pasadas las 23.00. Fuentes sindicales reconocieron a Levante-EMV la existencia de un preacuerdo. Sin embargo, la redacción del mismo se dilató debido a los avales de los pagos retrasados a ejercicios venideros, una garantía sin la que el comité no estaba dispuesto a firmar el preacuerdo.

El Gobierno de la Generalitat exigió el jueves que el acuerdo con los sindicatos sea unánime para dar validez a lo pactado. De no ser así, amenazaba con devolver su planteamiento al del principio: 20 días por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades (el mínimo legal en caso de ERE).

El preacuerdo a falta de flecos no es definitivo, ya que la mayoría de sindicatos ha convocado hoy a sus afiliados para que se pronuncien. Al cierre de esta edición, se sabía que Intersindical celebrará asamblea a las 10.30. No obstante, si habrá finalmente asamblea general de trabajadores: será hoy a las 17.00 en Burjassot.

El periodo de consultas del ERE finaliza a las 23.59 horas de mañana, de modo que la votación de hoy se antoja definitiva.

Algunos empleados han manifestado ya en las redes sociales su negativa a cualquier acuerdo que no pase por la reapertura de la cadena, apagada desde el 29 de noviembre de 2013.

El posible acuerdo, que supondrá para la Generalitat un coste que se acercará a los 86 millones, significa para Alberto Fabra la garantía de la extinción controlada de Canal 9 hasta junio de 2015, ya que cerrará el paso a posibles demandas judiciales colectivas.

Una de estas, formulada por un sindicato, podría volver a tumbar el ERE en los tribunales, como ya ocurrió con el primero y obligar a la readmisión de los trabajadores, que ya llevan (más de 1.500) casi cuatro meses cobrando su nómina y sin trabajar.

Al cierre de esta edición no había trascendido cómo quedan las diversas prestaciones lineales según la retribución anual y la edad. Estas bufandas elevarían en realidad la indemnización hasta cerca de los 40 días por año trabajado. Sí que trascendió que el preacuerdo apalabrado contempla 30 recolocaciones (el comité pedía 200 inicialmente y la dirección ofrecía 20).