Las etapas de máxima convulsión no admiten matices, ni enmiendas. Las fracturas sociales y políticas tienen tal capacidad de succión que ni siquiera reparan ante mitos e iconos vivientes. Que se lo pregunten a Raimon, el cantautor de Xàtiva, abanderado de la canción protesta contra el franquismo con himnos de resistencia como Al vent o Diguem no y cuyo combate en favor de la cultura catalana le ha hecho acreedor del Premi d'Honor de les Lletres Catalanes, que recogerá el próximo 10 de junio. Unas declaraciones en Catalunya Ràdio en las que confesó que no es independentista y expresó sus recelos sobre la «repercusión» negativa del proceso en la C. Valenciana, le valieron un aluvión de críticas en las redes sociales. «Traidor al país» o «vendido», fueron algunos de los obsequios que recibió.

En una entrevista en El Suplement, de la radio pública catalana, le preguntaron por su posición. «No lo tengo claro; si lo tuviera claro, ya habría participado en muchos sitios, pero cuando yo participo en cosas tengo que estar muy convencido», argumentó. Y añadió: «Yo no soy independentista porque no me lo había planteado nunca y desde Valencia todo esto se mira de otro modo». El trovador de poetas como Ausiàs March considera que la independencia «te la miras con más atención, si piensas en términos de unidad cultural, y con más alarmas porque en el País Valenciano hay un anticatalanismo que está funcionando y puede crecer». Quien cantó «Jo vinc d'un silenci (...) de gent sense místics ni grans capitans (...) que en frases solemnes no han cregut mai» expresó sus críticas a las posiciones maximalistas. De un lado, «parece que con la independencia ya no habría paro». Por otra parte, desde la otra orilla pintan un panorama de «catástrofe absoluta en caso de independencia», reflexionó. El cantautor lamentó que «parece que sólo podemos ser independientes o quedarnos como estamos», dijo, para añadir: «quizás hay otras opciones».

La solución al conflicto pasa, según él, por las urnas. «Si votas, no impones, sino que decide la mayoría». Las críticas arreciaron. Antes, ya había sido cuestionado por su «ausencia» en el debate soberanista, a raíz de no haber actuado en el concierto por la independencia en el Camp Nou y de las declaraciones que hizo en una entrevista en la revista El Temps. «Le preguntaban a Feliu Ventura como se veía el proceso desde Valencia y contestó que ya notaban los daños colaterales. Puede haber un exceso de anticatalanismo que en Valencia...Si no nos dejan votar la pregunta en cuestión, entonces hay que votar en unas elecciones. ¿Qué? Alguna de las opciones que dé la mayoría soberanista al Parlamento», declaró al citado semanario. «Ahora, que la solución sea estrictamente la independencia, tampoco lo tengo claro. Nunca he sido independentista porque nunca me lo habían puesto delante, pero no sé si es la mejor solución en las circunstancias actuales», añadió en El Temps. Un planteamiento que, aseguró, lo hace «desde la conciencia de ser valenciano». El escritor de Perpinyà Joan-Lluís Lluís, en Vilaweb, consideraba que la concesión a Raimon del Premi d'Honor de les Lletres Catalanes por parte de Òmnium Cultural, estaba «teñida de amargura» por ese «silencio». «Me parece clarísimo que desde la muerte de Franco nunca había necesitado tanto Cataluña la presencia de Raimon», escribía Lluís. El director de la propia Vilaweb, el valenciano Vicent Partal, salió en defensa de Raimon y se mostró «alarmado» y «triste» por determinadas posiciones «insensatas». Partal, claramente alineado con el independentismo, recuerda que Raimon «nunca ha hecho nada porque fuera fácil, más bien ha hecho muchas cosas difíciles, algunas que hemos aclamado y otras que no hemos comprendido como cuando fue a cantar a aquel festival por Miguel Ángel Blanco». «Quiero un país que respete la libertad de pensamiento, quiero que nuestra república esté llena de disidentes (..) gente que nos impida caer en el conformismo. Eso es lo que Raimon ha hecho toda la vida», escribió Partal.

Una cuestión de «honestidad»

El escritor setabense y exdirigente de ERPV Toni Cucarella critica a quienes han actuado igual que los que practican la «intransigente actitud españolista del conmigo o contra mí». «Si Raimon ha sobrevivido a tantos enterradores hasta convertirse en referente de la cultura catalana es porque siempre se ha expresado desde sus convicciones y no desde la voluble coyuntura». «Hay muchas personas honestas que como Raimon se sienten incómodas porque no habían previsto encontrarse en este dilema hamletiano», apuntó. Cucarella añadió que sólo «discutiría una afirmación» de Raimon: la advertencia de que aumentará el anticatalanismo si hay independencia. «Al españolismo no le hace falta que llegue ese momento», sostuvo.

En una entrevista en El Periódico, Raimon ha matizado:«Según cómo vaya el proceso, votaría sí». Este diario intentó ayer contactar con el cantautor, quien no pudo atender la llamada al estar inmerso en los ensayos de los conciertos que dará en el Palau de la Música Catalana, desde hoy al domingo.