Las relaciones entre la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco (PSOE), y su vicelalcalde, Enric Nomdedéu (Compromís), no serán fáciles. Cada uno tiene asumido el rol que han de desempeñar en la coalición de gobierno, pero si alguno se atreve a ir más allá saltan las chispas, por nimio que sea el asunto. Así sucedió el martes, cuando Marco prohibió a Nomdedéu ocupar su despacho a pesar de ser ese día alcalde en funciones, según fuentes municipales.

El vicealcalde asumió la alcaldía de manera provisional por el periodo de vacaciones de Marco y decidió aposentarse por ello en el despacho de la alcaldía, una práctica que fue habitual en los años de gobierno del Partido Popular. Los alcaldes populares solían ceder los despachos a los concejales que cedían la vara de mando municipal cuando se iban de vacaciones. El vicealcalde, de Compromís se llevó su portátil para trabajar e, incluso, hizo mofa cuando colgó en las redes sociales una foto suya en la mesa de la alcaldía en blanco y negro y con las banderas de la Comunitat Valenciana y Europa de fondo.

Pero esta actuación parece que molestó a la alcaldesa, que al enterarse de ello envió un mensaje al grupo de «whattsapp» que comparte el equipo de gobierno en el que ordenaba a Nomdedéu abandonar sus aposentos. La alcaldesa vio inadecuado el cambio de ubicación al disponer, adujo, en su despacho de pertenencias personales, según las mismas fuentes. También envió dos ordenanzas para cerrar con llave la habitación. Nomdedéu tuvo que pedirles que le abrieran un momento para poder recoger su ordenador.

El regidor de Compromís volverá a sustituir en la alcaldesa en la última semana de agosto y tendrá que dirigir el ayuntamiento desde la vicealcaldía. Ayer el primer edil accidental fue Antonio Lorenzo por las vacaciones de alcalde y vicealcaldesa.