La Generalitat Valenciana no podrá destinar al Plan de Dignificación de la Vivienda Social cerca de 700 viviendas públicas de un parque próximo a las 14.000 debido al estado de abandono por falta de mantenimiento y desidia de la anterior administración, según dijo ayer la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio Maria José Salvador.
La consellera anunció un «plan de choque» para poner al servicio de «los colectivos más vulnerables» el parque de viviendas de la Generalitat.
Los intentos de la conselleria por reactivar el parque de viviendas, bien públicas, bien en desuso y propiedad de los bancos para ponerlas al servicio de estos colectivos, entre los que se encuentran las víctimas de los desahucios, se ha encontrado con el deterioro de las instalaciones y con el desinterés de la banca.
La consellera criticó ayer que el Partido Popular diera la espalda «a los más necesitados» en materia de vivienda, «incumpliendo sus obligaciones legales» con «una clara voluntad de acabar con la vivienda social». Explicó que en el presupuesto de 2015 se habían presupuestado 8 millones para mantenimiento del parque público de vivienda de los que solo se han ejecutado 400.000.
6,5 millones para rehabilitación
Recordó que el nuevo gobierno de la Generalitat ha destinado 6,5 millones de euros para la rehabilitación del parque público de vivienda y que existen ya 250 actuaciones de reforma en marcha y 250 adicionales que se licitaran en breve.
En relación a las viviendas de protección pública construidas en los últimos años Salvador aseguró que la EIGE se convirtió «en una empresa más al servicio de la especulación» cuando debería haber dedicado sus recursos a «garantizar el derecho a la vivienda de los ciudadanos en situación de vulnerabilidad».
La Generalitat está revisando las condiciones en las que alquila las viviendas de su propiedad— solo un 42% de las 1.042 viviendas en alquiler tiene inquilinos—y proyecta aplicar estas nuevas condiciones en el primer semestre de 2016.
Por otra parte, la conselleria quiere acabar con los guetos que han aparecido en algunas de sus propiedades poniendo en marcha un Plan de Intervención Integral Sostenible (PIINS).
Se trata, dijo, de «evitar la conflictividad social» mediante políticas de «integración» y «diversidad» que se coordinaran en colaboración con los servicios sociales de los ayuntamientos y que no se limitará a la regeneración física de las viviendas. El EIGE ya ha comenzado aplicar planes con estas características en Elche, Alcoi, Sagunto, Alzira, Burriana, Riba-Roja y Paterna.
