Solo las personas con problemas transitorios de movilidad a causa de una enfermedad o patología «de extrema gravedad» podrán tener acceso a las nuevas tarjetas especiales de aparcamiento para discapacitados temporales que autorizará el Consell en breve. La Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas está trabajando ya en la renovación de la orden de 2001 que regula los casos en los que las personas discapacitadas pueden acceder a una de estas tarjetas de aparcamiento, tal como venía reclamando el Síndic de Greuges, José Cholbi, a raíz de la queja de un vecino de Alicante que la pidió después de que su mujer sufriera un ictus y le fuese rechazada.

Actualmente la normativa solo permite expedir estas autorizaciones de aparcamiento para las personas con el grado definitivo de discapacitad reconocido lo que deja fuera a todos aquellos enfermos con dificultades motoras transitorias tras pasar por un proceso agudo como un ictus, tal como reconocía Cholbi en la sugerencia que hacía a Igualdad.

Según el texto en el que está trabajando el Consell podrán obtener esta autorización «por razones humanitarias», las personas con movilidad reducida, «aunque ésta no haya sido dictaminada oficialmente, por causa de una enfermedad o patología de extrema gravedad que suponga fehacientemente una reducción sustancial de la esperanza de vida que se considera normal para su edad».

Fuentes de la conselleria no entraron a valorar la casuística de los pacientes que podrán optar o no a la prebenda ya que deberán ser los médicos los que, a través de una evaluación y previo informe, dictaminen si la persona reúne las condiciones.

Lo que sí queda claro es que una persona con un problema puntual por una operación en sus extremidades inferiores, por ejemplo, o con una rotura de huesos en una pierna no entraría en esta categoría. El Consell todavía no da fechas sobre la entrada en vigor de la nueva normativa que está todavía en tramitación. El texto se ha remitido al Consell Jurídic Consultiu para su valoración. Una vez se tenga el informe favorable, se deberá aprobar por el pleno del Consell.

Tal como adelantó Levante-EMV, la normativa ampliará los casos en los que se podrá acceder a la tarjeta especial de aparcamiento. De esta forma, podrán ser también beneficiarias las personas ciegas, sordociegas y con deficiencias visuales graves y los transportes colectivos de personas con discapacidad.