La portavoz del Grupo Popular en la Diputación de Valencia, Mari Carmen Contelles, criticó ayer el nombramiento de 15 asesores nuevos en el Instituto Alfonso el Magnánimo (IAM), algunos de los cuales tienen «un perfil político» y «cuyo mérito es ser altos cargos de Compromís». Así lo manifestó en una rueda de prensa en la que denunció que en las instituciones valencianas, ser miembro de Compromís tiene un plus sobre los currículum. «En la coalición han olvidado su eslogan de rescatar personas; han venido a rescatar a los suyos», dijo.

Contelles señaló que Rius y el director del IAM Vicente Flor han hecho 15 nuevos nombramientos en la entidad pública, y cuestionó que entre estas incorporaciones «el perfil de algunos es un político y sobre todo son altos cargos de Compromís». Así, concretó que se trata de los casos del ex secretario local de Compromís en Oliva en 2012, Ferran Escrivà,; del exalcalde de la formación en Benifairó, Josep Antoni Alberola, y del concejal en Nules Ramón Canut.

Contelles aprovechó para recordar que el nombramiento de Vicente Flor como director del IAM, fue «un procedimiento que se pasaron por el forro y no fue ni transparente ni ético» y que está en el juzgado. «Parece ser un requisito ser miembro de Compromís», insistió la dirigente que apostó porque sea gente con valía y cualquiera debe poder presentarse», señaló.

Por su parte, el diputado de Cultura, Xavier Rius, dijo desconocer la adscripción ideológica de los nombrados y, en todo caso, indicó que Compromís, como otros partidos, tienen afiliados por lo que es lógico que «la realidad social se plasme en los nombramientos».

En todo caso, explicó que los asesores a los que ha aludido Contelles son en realidad colaboradores de la institución y afirmó que su elección ha seguido el reglamento, que estipula que los directores de cada uno de los institutos deben proponer al director de la institución los nombres de los colaboradores que desean incorporar para que este los apruebe, sin necesidad de que el proceso pase por el consejo de administración.

Por su parte, desde la institución cultural se preciso que sólo se ha contratado a cinco personas, todas ellas «con gran curriculum». Informó que todos cobran 6.000 euros brutos aanuales, menos que en el periodo anterior, y que al margen de estos contratos se ha propuesto la designación de directores de colecciones que no son contratados y que cobran cantidades simbólicas por trabajo hecho. «Los directores de colecciones presenten una gran diversidad ideológica y no se les pide su afiliación, sólo el curriculum», añadió.