Carlos Álamo, director de la Reserva de Valdeserrillas, rechaza las acusaciones de la fiscalía de Medioambiente, que lo ha imputado por la muerte por inanición de dos bisontes en el paraje natural que gestiona. Tal y como adelantó Levante-EMV en su edición de ayer, los responsables de la investigación creen que la aparición del cuerpo decapitado del macho alfa de la manada —bautizado como Sauron— el pasado 16 de septiembre forma parte de un montaje y acusan al director de la reserva como responsable de un presunto delito de maltrato animal, con la intención de esconder el estado de desnutrición que sufrían los ejemplares.

Álamo, sin embargo, rechaza tal versión de los hechos y apunta que aportará pruebas para respaldar sus actos: «No soy un maltratador de animales», afirma.

El responsable de la reserva atendió ayer a este diario y fue contundente: «Es cierto que el martes pasado realicé una declaración como investigado en las dependencias de la Guardia Civil. Fui con mi abogado y aporté todo tipo de pruebas. El próximo martes —pasado mañana para el lector— haré lo mismo ante la fiscalía».

Sobre las acusaciones de mal estado de los animales, Álamo se mostró contrariado: «No es verdad. Tengo fotografías de Sauron y el otro bisonte atacado—no tenía nombre, lo llamábamos 102— en las que se ve que eran animales hermosos, que no estaban 'en los huesos'. Nada más encontra los cadáveres llamé al Seprona. Mi intención es que se aclare lo sucedido. Que se encuentre a los culpables de los hechos».

El director también comenta que «los bisontes son los únicos animales que reciben una alimentación externa en la reserva ya que sino se morirían de hambre, el resto de animales come de lo que encuentra. Les compramos un cereal especial y un suplemento alimenticio y tengo las facturas que así lo demuestran».

Álamo también comentó que «se han dicho muchas mentiras. No es cierto que tenga un seguro para los animales, no voy a cobrar nada de sus muertes. Somos una firma privada que vive de las entradas y de los patrocinios. Puede ser que los pierda después de todo lo que he leído».

«No soy cazador»

«No soy cazador. Nunca he descuartizado a un animal. No entiendo lo que dicen ahora. De hecho, recuerdo que el veterinario que investigaba los hechos me dijo que el que cortó la cabeza de Sauron sabía lo que hacía», prosiguió el imputado.

Y es que también reconoció que «nos han llamado muchas veces pidiéndonos huesos de bisonte y nunca hemos dado nada. Son unos animales bastante raros por estos lares y forman parte del imaginario colectivo, aparecen mucho en películas del oeste».

Cuestionado por posibles autores de los hechos, Álamo expuso que «prácticamente sospecho de todo el mundo. Son muchos los que hablan mal del proyecto sin razón alguna».