A Daniël Jansoone, un residente belga de Calp de 83 años, se lo tragó la tierra el pasado 21 de enero, día en el que se desató un violento temporal marítimo y de lluvia. Ahora se teme que se lo tragase el mar. Su coche, un Peugeot 207 de color negro, ha aparecido sumergido en Puerto Blanco. Los GEAS de la Guardia Civil lo encontraron en el fondo de esta dársena calpina. No hallaron a nadie dentro. Sin embargo, suspendieron las labores de búsqueda dado que el mar estaba muy revuelto y había poca visibilidad. Los investigadores creen que la riada pudo arrastrar el vehículo al mar.
Por otra parte, los casi 150 litros por metro cuadrado caídos de forma torrencial en poco más de cuatro horas en el entorno de Alicante y los 135 l/m2 en el casco urbano provocaron la noche del pasado lunes el colapso de numerosos servicios, inundaciones e importantes daños en propiedades particulares y en el mobiliario urbano, especialmente en las playas.
El alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, destacó el funcionamiento de las infraestructuras antirriadas de la ciudad construidas por la Generalitat tras las inundaciones de 1997, que causaron cuatro fallecidos y 235 heridos.
Las del lunes fueron las terceras precipitaciones más importantes de la historia reciente de la ciudad con 149 litros por metro cuadrado (el máximo se registró en la partida de Cañada del Fenollar) tras la riada de 1982 y la citada del 97.
Echávarri calificó de «ejemplar» el comportamiento de esas infraestructuras y no ha reconocido ningún fallo, solo incidencias en la avenida de Niza con dos urbanizaciones con los garajes todavía anegados y pérdida de arena y elementos de mobiliario recién repuestos en la playa de San Juan.
El edil de Seguridad, Fernando Marcos, y el intendente de la Policía Local , Luis Gómez, destacaron que el depósito de tormentas de San Gabriel recogió 60.000 metros cúbicos de agua, el máximo de su capacidad, evitando que el citado barrio se inundara. El parque inundable de La Marjal recogió 15.000 litros, quedándose a dos tercios de llenarse y evitando «una situación dramática como la que se vivió en 1997 en la playa de San Juan», según el alcalde.
El jefe de Bomberos, Eduardo Aragolaza, recalcó que no estaba decretado ni siquiera el nivel amarillo por lluvias en Alicante, solo preemergencia por vientos. El edil de Seguridad ha comentado que el alcalde activó el plan municipal de emergencias ante el aluvión de llamadas de ciudadanos a Bomberos y Policía Local, y por la evolución de los acontecimientos.
Hubo más de 300 emergencias y 212 salidas de Bomberos, entre ellas una veintena de personas rescatadas de vehículos en la Playa de San Juan, la Albufereta, Santa Faz y Verdegás, y de viviendas y mascotas en Cañada y en locales de la Playa de San Juan. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, habló ayer con el alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, para mostrarle su «preocupación»por el temporal y «conocer de primera mano las consecuencias del mismo».
Emergencia
El Ayuntamiento de Alicante activó en la noche del lunes el protocolo de actuación municipal frente al riesgo de inundaciones en fase de seguimiento de la emergencia tras la tormenta que arreció sobre la ciudad desde las 19.00 horas y que dejó en una hora más de 45 litros por metro cuadrado de un total de 138. El consistorio decreto la suspensión de clases en el colegio de La Canyada de Fenollar, Gloria Fuertes y Santo Ángel como medida preventiva.
La Guardia Civil rescató a dos personas atrapadas por el agua que se refugiaron en el techo de su vehículo en San Vicente del Raspeig. En la misma localidad una patrulla que iba a auxiliar a una mujer atrapada en su coche tuvo que abandonar el todoterreno oficial arrastrado por la riada.
Varias urbanizaciones de la avenida Niza en la playa de San Juan de Alicante quedaron totalmente anegadas por la tromba de agua.
Las inundaciones afectaron también a la Universidad de Alicante (UA), aunque ayer abrió sus puertas «con normalidad en todos sus aularios», indica el vicerrector de Infraestructuras, Rafael Muñoz. Por su parte, unos 2.400 alumnos no acudieron ayer a clase en el Campus de San Joan por posibles problemas en los accesos. Hoy se reanudarán las clases.
El Hospital General y el de Sant Joan cerraron quirófanos por las goteras y suspendieron una veintena de intervenciones.
El responsable del Laboratorio de Climatología de la UA, el catedrático Jorge Olcina calificó de «excepcional» la sucesión de temporales en el campo de Alicante.
El catedrático recordó que en apenas 6 meses, desde el pasado 1 de octubre, con el inicio del llamado Año Hidrológico, se ha recogido toda la lluvia habitual en un año.
