El titular del Juzgado número 3 de Valencia, Florencio Izquierdo, alertó ayer del aumento de la violencia ejercida por las hijas menores hacia sus padres, que se ha disparado un 20 % del total de este tipo de violencia en el seno familiar. En el Curso de Verano de Criminología de la Universidad Católica de València (UCV), el juez de menores especificó que «los menores entre 14 y 16 años ejercen una violencia mucho más psicológica, con insultos y vejaciones», y los mayores de esa edad «llegan al maltrato físico», según un comunicado del centro universitario.

Izquierdo cuestionó la conveniencia de que los menores de 14 años sigan excluidos del Derecho Penal de Menores y afirmó que este 20 % en la violencia intrafamiliar ascendente es «un dato que hace que el maltrato de hijas hacia sus padres haya dejado de ser excepcional como lo era hace algunos años». El magistrado lamentó que la mayor parte de las ocasiones esta violencia la recibe la madre, porque está más en contacto con los hijos, y porque «no devuelve los golpes».