19.173 millones de euros. A esta cantidad asciende los excesos de déficit público que la Comunitat Valenciana lleva acumulados desde que empezó la crisis en 2008. La cifra evidencia la dificultad para cumplir con los objetivos de déficit público. Se trata de un compromiso con la austeridad que se convirtió en obligación legal en 2012 (con la aprobación de la ley de estabilidad presupuestaria) y que este año está más cerca que nunca de cumplirse. Paradojas de la vida será un Consell
Al menos esta es la previsión que baraja la Autoridad Fiscal Independiente (Airef). En su último informe fija en una décima la desviación prevista para 2017. El objetivo de déficit se sitúa en 0,6% y la Airef prevé que las cuentas se cierren con un desfase del 0,7%, es decir, cien millones más que se suman a los 600 permitidos.
En espera de que esta previsión se cumpla, un recorrido por los resultados presupuestarios de la última década muestra cómo el Consell del PP se desvió de forma notable del camino marcado en el Consejo de Política Fiscal y Financiera.
El incumplimiento más notable ocurrió en 2011, el año más difícil para las finanzas valencianas. Entonces, el Gobierno impuso un objetivo de déficit del 1,3%, es decir, permitía a la Comunitat un desfase máximo entre ingresos y gastos (que debía cubrirse con deuda) de 1.300 millones. El ejercicio cerró con un agujero del 6,6%, es decir, 6.696 millones. El desvió tocó techo: 5,3%.
El Consell de Fabra no tuvo más remedio que encomendarse al rescate que el Gobierno había diseñado para salvar de la quiebra a las autonomías: el FLA. A partir de entonces, la Generalitat lleva enganchada a ese gotero con el que de manera ordinaria se cubre el déficit autorizado y, con carácter extraordinario, el no autorizado. Todo es deuda, que algún día deberá devolver.
A partir de 2011, el déficit se ha ido reduciendo, y por lo tanto, los excesos. Hubo un repunte en 2015 cuando el Gobierno marcó un 0,7 % y el Consell quedó en 2,6%, es decir, se pasó 1,9 puntos. En 2016 se quedó a ocho décimas (800 millones) de cumplir. En total, en nueve años, el déficit público aculado suma los 29.943, de los que 19. 173, el 64% estaban fuera de autorización.
