La Coordinadora para la Prevención y la Denuncia de la Tortura (CPDT) ha denunciado este miércoles cuatro casos de torturas que afectaron a diez personas que se encontraban bajo custodia institucional en 2016 en la Comunitat Valenciana. Las cifras se incluyen en el informe del pasado año sobre la tortura en el Estado, que eleva a 117 las situaciones de agresiones y malos tratos en el conjunto de España, con 259 afectados.

De acuerdo con el informe, estas agresiones se produjeron sobre personas bajo custodia de funcionarios en somisarías, cuarteles, prisiones u otros centros de privación de libertad o durante intervenciones policiales, por ejemplo, en manifestaciones.

Así lo han dado a conocer en una rueda de prensa César Manzanos y María Ángeles Orti, miembros de la Coordinadora para la Prevención de la Tortura, que cuestionan esta cifra ya que, según aseguran, hay muchos más casos que no se denuncian y que, por lo tanto, no pueden documentarse.

En el caso de la Comunitat Valenciana, uno de los supuestos se habría producido en el Centro de Internamiento de Extranjeros de Zapadores en febrero y afectaría a cinco ciudadanos de origen argelino y uno marroquí, que fueron deportados a sus países de origen después de que uno de ellos interpusiera una denuncia por presuntamente haber sufrido agresiones de policías, de acuerdo con la denuncia de la Campaña CIE NO.

Un segundo, de acuerdo con la información publicada en prensa, afectaría a dos hombres de nacionalidad rusa que fueron detenidos y puestos en libertad y supuestamente agredidos por policías de paisano que les vigilaban de incógnito cuando se acercarona preguntar por qué les seguían. Los agentes quedaron en libertad con cargos.

La tercera denuncia se refiere, con la fuente de la propia afectada, a una mujer detenida por la Guardia Civil de Cheste y que aseguró haber sido lesionada y vejada por los agentes y dijo haber sufrido lesiones duranta la reducción policial, que denunció en los juzgados de Madrid. El último caso, con documentación de prensa, se refiere a un portero de origen rumano que denucnió haber sido agredido por un policía de Benidorm mientras estaba en su trabajo.

César Manzanos ha señalado que en ocasiones las personas afectadas no denuncian porque "existe una gran desconfianza ante la administración de Justicia" y otras se abandonan porque los denunciantes están sometidos a "situaciones de coacción". En esta línea, ha destacado la importancia que tienen los medios de comunicación junto con abogados, movimientos sociales y lo propios afcetados a la hora de denunciar estas situaciones.

Jornada en septiembre

La Coordinadora ha organizado para el 21 de septiembre en València una jornada sobre malos tratos, tortura y muertes bajo custodia institucional en la que se abordarán varios temas relacionados con las denuncias y los casos que se recogen en el informe presentado.

En la primera mesa a las 18.00 horas se presentará el informe y la evolución de los casos de la Comunitat en los últimos 15 años; un testimonio sobre uno de los casos de València; y una conferencia sobre el apoyo psicosocial y jurídico a las víctimas de abusos policiales, malos tratos y torturas.

En la segunda mesa, que comenzará a las 20.00 horas, se hablará de la justificación, invisibilización e impunidad y sobre el aislamiento carcelario como tortura y muertes bajo custodia.