Un total de 1.971 millones de euros hubiera tenido que pagar la Generalitat Valenciana por el cumplimiento de los tres contratos firmados para las concesiones de las autovías CV-35, CV-50 y CV-95, cuando el presupuesto máximo de las obras era de 367 millones de euros. Así se extrae de la intervención de la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, en la Comisión de Obras Públicas de ayer en las Corts.

Según Salvador, «la inacción y la falta de control del anterior gobierno con las concesiones de las autovías nos está costando mucho dinero a todos los valencianos». Y es que la consellera explicó que con la modalidad de «peaje en sombra» empleada por la administración predecesora, «las empresas hacían las obras y la Generalitat pagaba después un cánon a lo largo de muchos años que generaba una importante deuda pública así como el crecimiento exponencial de costes para la Generalitat».

Al utilizar estas prácticas, la conselleria ha tenido que actuar en estos tramos de carretera comarcales de diferente manera. En la CV-50, entre Benaguasil y la A-3, el gobierno actual ha resuelto el contrato de concesión de mutuo acuerdo con una indemnización de 2.629.773,56 euros a la empresa contratista, correspondientes a los gastos generados de dicha actuación y al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales costeado en su momento por la Generalitat.

En el caso de la CV-35 (entre València y Losa del Obispo), se ha instado a la empresa concesionaria a cumplir con sus obligaciones, entre ellas «exigir el alumbrado artificial», ya que, según María José Salvador, la anterior consellera, Isabel Bonig, acordó la suspensión parcial del contrato.

Por otra parte, la Generalitat tuvo que abonar 9,5 millones de euros a la concesionaria de la CV-95 (tramo Orihuela-Costa) como consecuencia de una condena en marzo donde se obliga a indemnizar a la contrata por lucro cesante, ya que según Salvador el anterior gobierno renunció a ejecutar la obra de forma unilateral sin la opción de llegar a un acuerdo.

Compromís pide revisar contratos

A raíz de la comparecencia de la consellera de Obras Públicas, la diputada de Compromís, Teresa Garcia, pidió la revisión del contrato de la CV-35. «Vamos a exigir un repaso de esta concesión, que aún queda viva, porque comporta 1.070 millones de euros en peaje a la sombra hasta el año 2040 y los estudios para su justificación posiblemente, no sea correcta», señaló la miembro de la formación naranja en les Corts.