Una convocatoria de elecciones autonómicas en Cataluña es la esperanza de los socialistas valencianos para quitarse el problema del 155 de encima. Compromís y Podemos no respaldan la aplicación de unas medidas que, entienden, cercenarían el autogobierno y los de Pablo Iglesias, en especial, utilizan este argumento como arma de presión frente al PSPV, el tercer socio en el Pacte del Botànic. Los de Ximo Puig, sin embargo, han intentado alejarse lo máximo posible del debate y, cuando han tenido que entrar, no se han salido de la línea de Ferraz.

El PSOE aseguró ayer que el ejecutivo de Rajoy no debería activar el 155 si Carles Puigdemont convoca elecciones autonómicas en las próximas horas, antes del pleno del Senado. La posición supone un respiro para los socialistas valencianos, que ayer instaron al presidente catalán a llamar a las urnas. Fuentes de la dirección de Blanqueries eran contundentes: si convoca elecciones, «sin duda» no se ha de continuar con el 155.

Puig fue más comedido en sus declaraciones públicas ayer, aunque pidió a su homólogo catalán unas elecciones como medio de regresar a la normalidad constitucional. «Sería muy importante para todos que [Puigdemont] convocara elecciones ya», dijo.

Puig no se pronunció, no obstante, sobre si el Gobierno central debería mantener la aplicación del artículo 155 en ese caso. Sí se declaró en contra del control de TV3. «No estoy de acuerdo con la intervención de medios, pero hay que ver la situación en su conjunto y esta es que se han roto las costuras de la ley», manifestó.

El conflicto «congela» las relaciones institucionales con el Govern

El conflicto independentista ha terminado por «enfriar» la relación política e institucional entre Cataluña y la C. Valenciana. El despliegue de los acuerdos de la cumbre celebrada hace un año en València está bloqueado, se evitan iniciativas conjuntas y desde hace semanas no existe contacto alguno entre Ximo Puig y Carles Puigdemont, que habían mantenido una relación fluida desde que accedieron al cargo.

Preocupado por el hecho de que la suspensión de la autonomíca catalana -la aplicación del famoso artículo 155 por parte del Senado- derive en una «recentralización» para el resto de territorios, Puig se opone a la decisión de Mariano Rajoy de intervenir los medios de comunicación públicos catalanes pero le pide a su homólogo la convocatoria de elecciones para sortear la pérdida del autogobierno. En los últimos tiempos ni siquiera se han podido coordinar iniciativas conjuntas como, por ejemplo, una exposición de Toni Miró que tenían previsto impulsar desde Cultura. pere rostoll alicante