«La sensibilización contra el maltrato y la violencia machista debería llegar a los juzgados. Falta formación de género sobre cómo tratar a la afectada para evitar volver a victimizarla y que no se arrepienta del paso que ha dado hasta denunciar».

Así se expresaba ayer en declaraciones a Levante-EMV Mayte Lafuente, la presidenta de la Asociación de Mujeres Supervivientes, uno de los más de 30 colectivos que han respaldado la iniciativa de la Asociación de Mujeres Separadas y Divorciadas del País Valencià de la que ayer informó en exclusiva Levante-EMV: la queja formal que presentarán en breve contra un juez de Sagunt por el «trato» que ha dispensado a mujeres, incluso denunciantes de violencia machista; una medida que él recibió extrañado, negando «faltas de respeto y más, con las víctimas».

La presidenta de la asociación de Amigas Supervivientes aseguró a este rotativo que conocía «al menos tres casos» de mujeres que «se habían sentido menospreciadas» por parte de este magistrado y lamentó que este «no hubiera asistido ni mandado a alguien del juzgado» a la mayoría de reuniones de coordinación que hace al ayuntamiento una vez al año para abordar la violencia de género con fuerzas de seguridad, sanitarios y otros implicados.

Aún así, hizo una reflexión global: «Se necesita una administración de Justicia más sensibilizada. Que los jueces tengan conciencia de lo que tienen entre manos, que son personas que han vivido episodios muy duros y han sufrido mucho psicológicamente».

Este es un hecho que, a su juicio, sí es tenido ya en cuenta a nivel policial y de Guardia Civil «cuando vas a presentar denuncia, pero no tanto en los juzgados». Por ello, abogaba por ampliar la formación de género y por «buscar fórmulas para que los jueces se impliquen más contra el maltrato; pero interiorizando los mensajes, porque de poco sirve que escriban libros sobre el tema pero luego en su día a día no lo apliquen», decía en relación a las publicaciones realizadas por el juez de Sagunt cuestionado por los colectivos feministas.

Además, incidía en otro aspecto: «En Sagunt, tenemos que esperar al juicio en el pasillo, con el riesgo de ver en cualquier momento a nuestro maltratador. No hay ninguna sala como ocurre en València. Y eso no ayuda a la víctima».

«No se merece esto»

Mientras ayer otras 15 asociaciones feministas secundaban el escrito de queja que se quiere presentar en breve, varios abogados de Sagunt con una experiencia de más de 15 años se mostraron ayer «extrañados» por la iniciativa al asegurar que nunca habían oído ni visto algo así.

«Es beligerante con los compañeros [letrados]si en algo discrepa y tiene carácter fuerte, pero con las víctimas, no. Si lo hubiera sido, cualquiera le habría denunciado al día siguiente», afirma uno de ellos.

«No se merece esto», resume la letrada y exconcejala del PSPV en Sagunt Isabel Sanz. «Es una persona directa, resolutiva, muy formada y convencida de lo que hace. Lleva el juzgado al día y dudo de que el Ministerio Fiscal viera negligencias y no actuara», asevera, además de cuestionar que la Concejalía de Igualdad municipal «callara» si «llevaba años recogiendo críticas», tal como desde aquella aseguraron a la asociación de mujeres, aunque sin aportar cifras.