De "día negro" a "impulso legislativo" en el superpleno de las Corts

PSPV y Compromís lamentan la "involución" de las cinco leyes presentadas por los populares y Vox que defienden que estas darán "más libertad"

Los síndics de Compromís y PSPV hablan al lado del portavoz de Vox, antes de empezar el pleno.

Los síndics de Compromís y PSPV hablan al lado del portavoz de Vox, antes de empezar el pleno. / José Cuéllar/Corts

Diego Aitor San José

Diego Aitor San José

Todo lo que hasta ahora eran anuncios, declaraciones y justificaciones, este miércoles se convierte en debate oficial, con su registro en el diario de sesiones. Las cinco leyes de PP y Vox sobre Transparencia, sobre À Punt, sobre la enseñanza del valenciano, la Agencia Antifraude y la ley de Concordia se empiezan a tramitar en las Corts y lo hacen con diferentes interpretaciones según la bancada a la que se pregunte. Así, mientras para PP y Vox, proponentes de la norma, es un "día importante" para dar un "impulso legislativo de progreso" mientras que para PSPV y Compromís, la oposición, es "un día negro" de "involución democrática".

Son las palabras con las que han anticipado los síndics de los grupos parlamentarios el debate que se desarrollará este miércoles en el pleno y que evidencian que será una sesión de alta intensidad que finalizará el jueves con la votación de las cinco normas. Los ya anunciados votos favorables para la toma en consideración hacen prever que estas cinco leyes pasarán el primer filtro y comenzará su trámite parlamentario con enmiendas a la totalidad de la oposición, enmiendas parciales y posterior aprobación. Ese es el camino hasta julio.

Pero de momento lo que ha empezado es el debate sobre la toma en consideración. Cinco normas protagonizarán el pleno y por lo dicho en los pasillos se avecina choque entre bloques. Porque mientras para Vox es un "día importante" con leyes que traen "libertad y eliminan todo sesgo partidista" para Compromís es "un día negro para la democracia" y una "vuelta al pasado" y si para el PP es una muestra de "coherencia" y de "normalidad parlamentaria", para el PSPV es una "infamia" que tratarán de "frenar".

"Luchar con las armas democráticas"

La que más saliva ha necesitado es la de la ley de Concordia. Es sobre la que más tinta se ha escrito y es la que ya muestra que más pasiones y tensiones levanta. Es donde la oposición ha puesto el foco, con anuncio de recursos futuros también por parte del Gobierno central. "Es una ley que iguala a represores y represaliados, es una ley que dignifica y blanquea el franquismo", ha expresado José Muñoz, síndic del PSPV, que ha mostrado un tono duro y ha anunciado que el Partido Socialista "va a luchar con todas las armas democráticas para parar esta ley".

También ha mostrado su predisposición a llevar futuros recursos Compromís. "Nos tendrán enfrente, con enmiendas a la totalidad, con los juzgados y en la calle", ha asegurado su síndic, Joan Baldoví, quien ha lamentado la "poca calidez jurídica" de las normas al tiempo que ha indicado que hablar de "Concordia" en la ley es "un insulto a todas las personas". "Hoy empieza una etapa negra, una vuelta al pasado", ha sentenciado el portavoz de los valencianistas.

"Más libertad"

Por su parte, tanto PP y Vox han defendido que las normas propuestas son un "impulso legislativo" que "dará más libertad" a la Comunitat Valenciana. En este sentido, el síndic de los populares, Miguel Barrachina, ha focalizado el debate en el "salto" que se da en materia educativa para que sean "los padres y no los políticos" los que decidan sobre la lengua de educación. "Es un verdadero progreso, reformismo puro y duro", ha indicado por su parte el portavoz de Vox, José María Llanos, quien ha señalado que con la nueva ley de Concordia se protegerán los vestigios franquistas en vez de financiar su retirada.